El nuevo curso institucional ha comenzado y los altos cargos nacionales ya han hechos sus primeras apariciones públicas. El rey Felipe VI (50 años) ha retomado su agenda pública con una reunión de la Junta Directiva de la Sociedad Geográfica en el Palacio de la Zarzuela este martes 4 de septiembre, un regreso que supone su vuelta de las vacaciones y en el que se le ha podido ver muy bronceado.
El monarca lucía un color anaranjado en la piel; la cara y las manos resaltaban por encima de su traje gris con un tono cobrizo en el cutis. El sano color del Jefe de Estado ha destacado por encima del resto de asistentes que no ostentaban el mismo moreno que Felipe VI. El hijo del rey emérito Juan Carlos (80) ha escogido para la ocasión una corbata naranja con topos oscuros.
Este bronceado es el resultado de unas vacaciones monárquicas que se han mantenido, como de costumbre, en la más estricta intimidad. Cada año, los monarcas provocan la intriga general al esconder sus destino vacacional pero, este mes de agosto salió a la luz una información que apuntaba a que Letizia (45) y su marido habían escogido Mykonos como punto para vivir su asueto estival. Según adelantó el digital Look, ambos han estado paseando por las calles de Puerto Viejo. Él iba ataviado con una gorra blanca, estilo que acostumbra a vestir en sus temporadas de descanso. Siguiendo la tradición familiar, Felipe ha participado en las jornadas de regatas en el Club Náutico de Palma de Mallorca donde se le pudo ver embarcando en el Aifos 500, su barco de competición. Fue precisamente en la isla mallorquina donde gran parte de la Familia Real gozó del reposo y, aprovechando sus salidas públicas, posaron juntos para demostrar unidad.
Estos días de tranquilidad vacacional habrán sido la razón por la que en su regreso, el monarca luce este pronunciado bronceado. Ahora habrá que esperar para ver si la reina Letizia ha tenido la misma suerte durante el descanso en las islas. Será este miércoles 5 de septiembre cuando la monarca vuelva al foco mediático, en una aparición estelar que traerá su renovada tranquilidad.
La última vez que vimos a la reina en un acto público fue el pasado 17 de agosto en Barcelona. Aquel día tenían lugar los actos institucionales organizados en memoria del atentado que asoló a la ciudad catalana hace un año. Se trató de la última imagen pública de la asturiana, y la última puesta en escena junto a Felipe VI.
La pareja vuelve a su actividad después de uno de sus veranos más agitados tras la publicación de EL ESPAÑOL que destapó las polémicas instas de Corinna zu Sayn-Wittgenstein (53). En aquellas grabaciones se destapaban asuntos que dejaban en jaque al padre del actual monarca. Otro varapalo parar Felipe fue su paso por la clínica Ruber donde se tuvo que someter, el 14 de julio, a una intervención de radiofrecuencia por aguja.
[Más información: Las vacaciones 'secretas' de Felipe y Letizia, al descubierto: relax en Mykonos]