Ernesto de Hannover (65 años) no está en su mejor momento. La misma semana en la que han nacido sus nietos mellizos, Nicolás y Sofía, hijos de Alessandra de Osma (32) y Christian de Hannover (35), el Príncipe ha sido ingresado en un centro psiquiátrico.
De acuerdo con el periódico alemán Focus, la noche de este miércoles, Ernesto de Hannover llamó al departamento de policía local de Grünau (Alta Austria), mientras se encontraba en su casa. El marido de Carolina de Mónaco (63) aseguraba que alguien estaba tratando de matarlo y que necesitaba ayuda.
Tras la llamada, la policía se presentó en su domicilio, donde se encontraron con una pareja que desconocía la situación descrita. Finalmente, Ernesto de Hannover fue encontrado en el pabellón de caza de su finca con una actitud poco normal. De hecho, al ver a la pareja, el Príncipe se puso agresivo y comenzó a echarlos del lugar, asegurando que el hombre estaba intentando matarlo porque no le daba su medicamento.
Pero esto no fue no fue todo. Según el informe policial al que ha accedido el citado medio, el Príncipe también habría "amenazado a los oficiales con un cuchillo afilado de 30 centímetros". Además, algunos funcionarios denunciaron que, antes de ser detenido e ingresado en la Clínica Vöcklabruck por órdenes médicas, Ernesto de Hannover "golpeó a un agente en la cara". De ahí que se le acuse de "amenazas peligrosas, daños corporales graves, intento de daño corporal grave e intento de resistencia contra la violencia estatal".
El Príncipe también ha querido hablar al respecto y ha dado su versión de los hechos. Unas declaraciones que ha recogido el periódico austriaco Kronen Zeitung y que poco tienen que ver con el relato de los oficiales. "Tenía una hipoglucemia, así que llamé a emergencias", comentó Ernesto de Hannover. "Creo que estaban borrachos, al menos me dieron esa impresión. Luego me encadenaron a una ambulancia. No me dejaron salir por cinco horas", añadió el apodado Príncipe de los escándalos, que ahora amenaza con presentar demandas contra la policía y la psiquiatría. Mientras tanto, las autoridades piensan en retirarle su licencia de armas.
No es la primera vez que Ernesto de Hannover esta envuelto en una polémica similar. En 1998, el Príncipe llamó la atención por golpear una cámara con un paraguas y poco después, por patear a un fotógrafo en el Festival de Salzburgo. Además, el marido de Carolina de Mónaco llegó a tener problemas con un hotelero en Kenia y fue captado mientras orinaba en el pabellón turco de la Exposición Universal de Hannover.
[Más información: Sassa de Osma y Christian de Hannover, padres primerizos de mellizos]