El 2021 ha arrancado para la Casa Real noruega de la misma forma que cerró el 2020: con problemas. La princesa Mette-Marit (47 años) ha sufrido un accidente mientras esquiaba y acabó en urgencias con una fractura de coxis.
Según lo publicado por la prensa del país nórdico, la esposa del príncipe Haakon se encontraba practicando este deporte junto a su Ingrid Alexandra (17) en las montañas de Uvdal. Según los medios noruegos, los dos esquíes de la princesa se engancharon provocando su caída. Su hija acabó también en el suelo al intentar ayudarla pero, afortunadamente, no ha tenido las mismas consecuencias.
La Casa Real no ha emitido ningún comunicado al respecto por lo que todo lo que se sabe del asunto es lo que publica la prensa del país. Sobre la fecha del accidente no hay un acuerdo unánime. Mientras unos medios lo sitúan la noche antes de volver a Oslo para celebrar la Navidad, otros aseguran que tuvo lugar después del 25 de diciembre. Lo único seguro es que pasó la primera noche en observación en un hospital. En la actualidad la princesa Mette-Marit se recupera en su casa. En concreto en la casa de campo de Skagun, localidad cercana a Oslo, que es uno de los lugares de retiro favoritos de la familia real noruega.
En los últimos años Mette-Marit se ha destacado por tener un papel mucho más discreto que el que le llevó a ser objeto de críticas cuanto aterrizó en la Casa Real en 2001 al casarse con el principio heredero. Su pasado, que incluía un vídeo de ella bailando con el pecho desnudo, una intervención en un dating show y un hijo, Marius Borg (23), nacido de la relación con un hombre con un pasado reaccionado con el menudeo de drogas.
La princesa estuvo en el punto de mira en sus primeros años en palacio y las noticias, reales o no, sobre su comportamiento y sus discusiones con su marido eran habituales en la prensa europea.
Hoy, casi veinte años después de su enlace, la futura reina de Noruega ha conseguido hacerse con el cariño del país nórdico que ha asistido a la transformación de su figura en un mujer discreta ha formado una familia feliz con el príncipe heredero con el que ha tenido tres hijos: Ingrid Alexandra y Sverre Magnus.
Este accidente llega en medio del enfrentamiento en los reyes Harald (83) y Sonia (83) con su hija Marta Luisa (49) tras las entrevistas concedidas por ella en diferentes medios sobre las polémicas que la rodean, tras su unión con el chamán estadounidense Durek Verret (46). Además, a lo largo de 2020, Marta Luisa de Noruega ha estado en el punto de mira de los medios noruegos por saltarse en dos ocasiones las medidas de confinamiento en el país junto a su novio Durek Verret después de realizar una gira por varios países presentando una conferencia bajo el nombre de La princesa y el chamán que hizo que el palacio de Oslo emitiera un comunicado donde prohibía a Marta Luisa usar su título con finalidad comercial.
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