Harry de Inglaterra (36 años) y Meghan Markle (39), el duque y la duquesa de Sussex, han comunicado a la reina Isabel II de Inglaterra (94) que no regresarán a sus deberes reales como miembros activos de la Familia Real.

En los últimos días ha habido conversaciones entre el matrimonio y la soberana, y Harry y Meghan han decidido alejarse de manera permanente de las actividades institucionales que se llevan a cabo desde núcleo interno de la Familia real británica, de la que eran miembros de primera línea hasta hace un año. Tampoco volverán a vivir en el Reino Unido. 

En un comunicado emitido por el palacio de Buckingham, la Familia Real, con la monarca a la cabeza, dice estar "decepcionada" por esta determinación. Además, se confirma que la Reina ha pedido a su nieto y a la esposa de éste que renuncien a sus títulos militares y patrocinios honorarios. 

El príncipe Harry, nieto de Isabel II, y su mujer decidieron hace un año apartarse de la monarquía, empezar una nueva vida fuera del Reino Unido y ser financieramente independientes, en lo que entonces se conoció como el Megxit. Esta situación, en cambio, estaba pendiente de revisión a principios de 2021.

Con esta negativa por parte de Meghan y Harry, la jefa de Estado ha decidido retirarle a su nieto, sexto en la línea de sucesión al trono británico, los patrocinios honorarios que ostentaba y que volverán a la soberana, quien los distribuirá a otros miembros de la Familia Real. Tras conversaciones con el duque, la Reina ha confirmado que, al alejarse de los deberes reales no podrán seguir asumiendo las responsabilidades y obligaciones que conlleva una vida de servicio público. Momentos después de la embestida la reina Isabel, los duques de Sussex han respondido tajantes con otro comunicado: "Todos podemos vivir una vida de servicio. El servicio es universal".

Entre los patrocinios que el príncipe Harry perderá figura el de la Unión de Rugby, que este mismo viernes agradeció al duque de Sussex en un tuit su compromiso con este deporte "en los últimos años".

Entre los nombramientos militares honorarios que el príncipe devuelve a su abuela figuran el de capitán general de los Royal Marines, el de la Real Fuerza Aérea de Honington y la Royal Navy Small Ships, así como el patrocinio del Real Teatro Nacional y la Asociación de Universidades de la Mancomunidad Británica de Naciones (Commonwealth)

El 8 de enero de 2020, los duques de Sussex informaron de que daban un paso atrás y dejaban voluntariamente de ser miembros de primera línea de la Familia Real británica. En el comunicado manifestaban, además, su intención de mudarse de país - en un principio a Canadá, ahora viven en Los Ángeles, California- y ser independientes también en el plano económico.

No fue hasta el día 31 de marzo cuando se hizo efectiva, de manera oficial, la salida de Meghan y Harry de Buckingham Palace. A partir de esa fecha, los duques de Sussex dejaron de contar con su asignación anual, con su oficina en el palacio de Buckingham y pasaron a estar representados por un equipo de su fundación sin ánimo de lucro,

Actualmente, la duquesa de Sussex se encuentra embarazada de su segundo hijo en común con el príncipe Harry: será el noveno bisnieto de la reina Isabel II. Una feliz noticia que llega tres meses después de que ella misma confesase haber sufrido un aborto involutario en julio del año pasado. Además, en estos momentos todos los ojos están puestos en el esposo de la reina Isabel II, el príncipe Felipe (99). El duque de Edimburgo está ingresado en el hospital privado King Edward VII de Londres desde el pasado martes 16 de febrero. Entró voluntariamente tras desvelar que se "sentía mal". 

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