La reina Sofía (82 años) ha vuelto al país que la vio nacer y lo ha hecho tras más de un año sin visitarlo. Concretamente la madre de Felipe VI (53) no viajaba a Grecia desde febrero del año pasado antes de que irrumpiera la pandemia. Esta visita la fundamentan dos razones, una personal y otra profesional.
La primera de ellas es el férreo compromiso de la emérita con la fundación que lleva su nombre. La Reina ha volado hasta las islas griegas y comienza su estancia este 31 de mayo visitando el Centro de Rehabilitación para mamíferos marinos y tortugas, perteneciente al Santuario de Vida Marina de Mar Egeo. Con su presencia la monarca hace gala una vez más de su conocido amor por los animales, que también se demuestra con el convenio que firmó la organización benéfica que lleva su nombre con la entidad Archipelagos Intitute of Marine Conservation, a través del cual se ha fraguado la ilustre visita.
La página de la Fundación Reina Sofía se hace eco de este acuerdo destinado a mejorar la vida de los animales que viven en el mar: "La ayuda será destinada al Centro de Rehabilitación para mamíferos marinos y tortugas del Santuario de Vida Marina del Mar Egeo (Aegean Marine Life Sanctuary AMLS), con el ánimo de posibilitar la infraestructura necesaria para la puesta en funcionamiento dentro del mismo de un Centro de Rehabilitación y Rescate, en beneficio de especies marinas (delfines, tortugas, focas) varadas, ayudando a incrementar sus probabilidades de recuperación y liberación".
Este convenio entre las dos organizaciones se hizo efectivo el pasado marzo de 2020 y en el citado sitio web se estima que el proyecto está dotado con 20.000 euros y de sus acciones se beneficiará la isla de Lipsi, la mayor del archipiélago de Dodecaneso, sito en el mar Egeo. A pesar de ser la más extensa sus dimensiones no superan los 16 kilómetros cuadrados.
El viaje de la reina Sofía a Grecia coincide también en fechas con el cumpleaños de su hermano Constantino, que cumplirá 81 años el próximo 2 de junio. La celebración de este aniversario es la otra gran razón que da más peso todavía si cabe al desplazamiento de la Reina. Ella y toda la familia del homenajeado se trasladará previsiblemente a la región de Argólida, en Peloponeso, donde el hermano de la emérita reside desde 2013 en una lujosa casa cercana a Porto Jeli. Este viaje demuestra la fluida relación que sigue manteniendo con su familia de origen. De hecho, Sofía convive en Zarzuela junto a su hermana Irene de Grecia (79) con quien acudió a vacunarse de la Covid-19 el pasado 17 de mayo.
Su último viaje
La última vez que Sofía estuvo en el país heleno fue para asistir a la presentación de los diarios de su madre, la reina Federica, que detallan las actividades públicas y privadas de la familia entre 1937 y 1967. El Cotsen Hall de Atenas acogió la puesta a la venta de Diario de la reina Federica, una recopilación del día a día de la madre de la reina Sofía que encontró por casualidad el historiador griego Costas Stamatópulos en los Archivos Generales del país.
Allí estuvo acompañada por su inseparable hermana Irene de Grecia y también por Constantino, a pesar de que sus problemas de salud -derivados del ictus que sufrió en 2016- hacen que requiera la ayuda de una silla de ruedas para poder participar en estos actos.
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