Parece que los reyes de España, Felipe VI (53 años) y Letizia (49), están viviendo una segunda luna de miel. 17 años y cuatro meses después de su gran boda real -y su consiguiente honeymoon de ensueño valorada en 500.000 dólares- los soberanos están regalando al mundo momentos poco vistos en sus casi dos décadas de relación sentimental. 

Este pasado lunes, Felipe y Letizia arrancaban su semana de actos institucionales presidiendo uno conjunto en Lisboa. En la capital del país vecino y con su presidente, Marcelo Rebelo de Sousa (72), como anfitrión y testigo, los monarcas encarnaron una escena casi cinematográfica que fue inmortalizada por los fotógrafos acreditados.

Mientras bajaban las escaleras mecánicas de las instalaciones del flamante Botton-Champalimaud Pancreatic Cancer Centre de Lisboa, el Rey miró cariñosamente a su esposa, con la que compartió una confidencia aún con la mascarilla puesta. Ella le devolvió la mirada con una sonrisa que se apreciaba perfectamente en su gesto. Una imagen que llamó la atención de propios y extraños pues, tal y como se apunta, no es común que los padres de la princesa de Asturias, Leonor de Borbón, (15) y la infanta Sofía (14) se muestren afecto en público. Y aunque no es algo habitual, sí que ha habido momentos, a lo largo de todos estos años, en los que Felipe y Letizia se han dedicado alguna caricia e incluso algún beso en público. EL ESPAÑOL recuerda algunos de ellos.

1. La Coronación de Felipe VI

El 19 de junio de 2014 fue un día histórico no sólo para Felipe y Letizia, sino también para España. El único hijo varón del rey Juan Carlos (83) era proclamado rey de todos los españoles en una ceremonia solemne celebrada en el Congreso de los Diputados. Una cámara siguió a la Familia Real desde el palacio de La Zarzuela hasta las Cortes Generales y es ahí donde el matrimonio llamado a reinar protagoniza un instante más que romántico cuando creen que nadie les ve.

Una vez que la Reina ha sentado a sus hijas en el segundo coche de la comitiva, aún en los jardines de El Pardo, Felipe y ella toman posición en el Rolls-Royce donde se montaron como príncipes de Asturias pero volverían como Reyes. Para calmar los nervios de su marido, Letizia, sonriente, feliz, excelsa, acaricia el rostro de su esposo, el padre de sus hijas, el inminente rey de España. 

2. El gran aplauso

El 6 de diciembre de 2018, se celebraron 40 años de la Constitución Española. Mismo escenario, mismos actores. Felipe VI pronunciaba su discurso y al decir su última frase -"La Corona está ya indisolublemente unida en la vida de España a la democracia y a la libertad"- empezó una atronadora ovación que, poco a poco, se fue apagando, excepto por una persona: la reina Letizia.

El monarca intentó poner fin a sus aplausos levantando la mano para despedirse de los presentes en el hemiciclo e interpelando a Letizia para salir juntos. Imposible. No lo logró. La Reina seguía liderando los vítores al soberano en señal de orgullo, cariño y admiración pública. Fue en un segundo intento, con una tímida sonrisa pintada en sus labios, cuando Felipe logró que Letizia terminase con la infinita ovación. 

3. En Doñana

Era 14 de febrero de 2020: el día de los enamorados, el Día de San Valentín. Felipe y Letizia viajaron de Madrid a Huelva y visitaron el Parque Nacional de Doñana tras presidir el Congreso Científico de clausura de la Conmemoración del 50º Aniversario de esta Reserva de la Biosfera de la Unesco. Los soberanos derrocharon amor, cariño y complicidad durante toda la visita, tal y como confirmaron los presentes y como se aprecia en las fotografías realizadas de aquella visita oficial. 

4. Medalla de Honor de Andalucía

El pasado mes de junio, el rey Felipe recibía la Medalla de Honor de Andalucía en el Palacio de San Telmo de Sevilla. En su discurso, el soberano afirmó que su amor por el sur era compartido por igual por su esposa y sus hijas. "Y quiero deciros que el afecto que siento por todo lo andaluz es compartido igualmente por la Reina, la princesa de Asturias y la infanta Sofía. Y así se manifiesta en tantas ocasiones en que Andalucía se hace presente en nuestras conversaciones y en nuestro pensamiento. Agradezco muy sinceramente el cariño que los andaluces siempre habéis expresado y demostrado a lo largo de los años, a toda mi familia. Y que responden a un sentimiento espontáneo y sincero, fruto de la lealtad y de la confianza con las que siempre nos habéis distinguido".

Expresó, además, que ese reconocimiento era como un abrazo. "No la recibo como se recibe una condecoración, una insignia o un reconocimiento, sino como se recibe un abrazo". El mismo gesto cariñoso que su esposa le regaló ante los ojos de todos para esta colección de bonitos y románticos instantes de los reyes de España. 

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