Camilla de Borbón Dos Sicilias (50 años) ha conseguido una nueva victoria en su batalla contra el banco BNP Paribas. Según informan a EL ESPAÑOL, su último triunfo es un importante avance en la disputa que comenzó con la mencionada entidad tras las decisiones que tomó su madre, Edoarda (81), después del fallecimiento de su marido, Camillo Crociani, en la década de los 80.
En su afán de hacer valer sus derechos en los juzgados y tribunales de Mónaco, Francia y Reino Unido contra BNP Paribas, el pasado 10 de noviembre la aristócrata consiguió que el Tribunal Judicial de París pusiera término a la extravagante reclamación de Jersey, un paraíso fiscal que cuenta con una treintena de entidades financieras, incluyendo la compañía francesa.
Recientemente, BNP Paribas solicitó una orden judicial a Jersey para impedir que a Camilla de Borbón Dos Sicilias se le reconocieran sus derechos en París. Pero una hora antes de la audiencia, celebrada hace una semana, el tribunal parisino exigió y consiguió in extremis que la solicitud de la orden judicial se retirara de inmediato. Según la información que maneja este periódico, Jersey reconoció que la Princesa tiene razón y que la entidad bancaria ha fracasado en sus maniobras. Han sido alertados por la esposa de Carlos de Borbón y Chevron-Villette (58), quien "tiene toda la intención de que se reconozca su derecho a ser juzgada de forma imparcial".
La disputa entre la aristócrata y el BNP Paribas tiene su origen en las decisiones que tomó Edoarda tras la muerte de su marido. Siete años después de su partida, la artista italiana y encargada de los bienes del que fuera su esposo decidió meter su dinero en un fondo fiduciario que en un futuro debía repartirse a partes iguales entre Camilla y su hermana Cristiana, quien tiempo después inició una batalla contra el BNP.
Cristiana denunció a la entidad bancaria y a su madre por un supuesto desvío de 200 millones del fondo fiduciario de manera fraudulenta. Pero Edoarda negó estas acusaciones, argumentando que los movimientos se produjeron bajo el consejo del BNP, donde estaba depositado el dinero. Por esta razón, Cristiana también presentó una querella contra la empresa financiera y consiguió la devolución del dinero al trust.
Camilla de Borbón Dos Sicilias quiso mantenerse al margen de este conflicto, pero finalmente no pudo librarse. A la Princesa se le acusó de desacato al tribunal por no querer dar información sobre el paradero del dinero que presuntamente desvió su madre. Por ello se le condenó a pagar en Jersey 2,33 millones de libras, una multa récord por la que decidió apelar el pasado 3 de junio en el tribunal de la isla. La italiana quiso luchar por los hechos que se le imputaron y por la falta de pruebas del BNP Paribas. Confiaba en que tenía bases sólidas para salir victoriosa y recuperar estos fondos con éxito, pero perdió.
Según explicó su abogado a este periódico, Camilla de Borbón Dos Sicilias fue "víctima de una manipulación judicial" que, de acuerdo con el entorno de la Princesa, no ha hecho más que beneficiar económicamente a la entidad bancaria. "BNP Paribas intenta conseguir varios cientos de millones y ha usado la corte de Jersey a su favor", explicaron fuentes cercanas a EL ESPAÑOL. Aseguraron, además, que los encargados del caso en el citado paraíso fiscal han mostrado total parcialidad y han probado que están en contra de la aristócrata y su defensa. Por ello no veían conveniente seguir con el juicio en la isla.
Poco después de su apelación, este medio pudo conocer que la italiana depositó los fondos para liquidar la totalidad de la multa. A cambio, solicitó la garantía de su reembolso. "Fui condenada por desacato a la corte porque cuando me preguntaron por el paradero de los bienes de mi madre, dije que no sabía. Esta es la verdad. Al condenarme, el tribunal invirtió la carga de la prueba", explicó entonces la Princesa, quien hoy goza de una nueva victoria.
Camilla de Borbón Dos Sicilias ha conseguido que se reconozcan sus derechos en París nueve meses después de que el BNP perdiera su segunda batalla. Sus peticiones fueron desestimadas por el Tribunal de Apelación de París que, en concreto, acusaba a la entidad bancaria de haber intentado modificar los términos de la sentencia de Jersey, que debía ejecutarse en Francia y en Mónaco porque es allí donde Edoarda tiene su residencia.
[Más información: Camilla de Borbón dos Sicilias, "víctima de una manipulación judicial", según su abogado]