La infanta Elena de Borbón (58 años) y su hija, Victoria Federica (21), no han podido ocultar su gran pesar por la muerte de un hombre que formaba parte del círculo más íntimo de sus vidas. Su gran amigo José María Álvarez de Toledo, conde de La Ventosa, falleció esta semana a los 73 años tras sufrir un problema cardiorrespiratorio, y este lunes 11 de abril se ha llevado a cabo su entierro.
La hermana del Rey y su hija están devastadas por esta muerte, y han acudido a su último adiós para arropar con cariño y pesar a su viuda, Rita Allendesalazar y la Cierva. Ella es una de las mejores amigas de la infanta y se trata de prácticamente una segunda madre para Victoria Federica.
Para estar junto a su gran amiga, Elena y su hija se han desplazado hasta Segovia, donde ha tenido lugar el funeral y el posterior entierro del fallecido. Ante la triste pérdida, madre e hija no han podido contener las lágrimas a lo largo de la solemne ceremonia.
Muy afectadas, debido a la estrecha relación que las dos mantenían con el fallecido, Elena y Victoria se han mostrado inseparables durante toda la jornada, y estuvieron en todo momento muy pendientes de su amiga Rita Allendesalazar. La viuda estaba derrumbada tras la inesperada muerte de su marido. La infanta y su hija también tuvieron tiempo para conversar amigablemente con el resto de amigos y familiares de José María Álvarez de Toledo a las puertas de la iglesia.
Tras la misa funeral, que tuvo lugar en San Miguel Arcángel, la hija y la nieta de los reyes eméritos, Juan Carlos I (84) y Sofía (83), acompañaron al féretro junto al resto de la comitiva fúnebre hasta el cementerio de Muñopedro, donde enterraron al aristócrata, en una íntima ceremonia. La emoción invadió a todos los presentes, que se abrazaron y consolaron unos a otros debido al vacío que ha dejado el conde de La Ventosa en todos ellos.
Una vez más, y a pesar de las circunstancias, Victoria Federica, la primera royal influencer de España, se mostró estilosa y optó por la coleta que tanto le favorece. La hija de Elena de Borbón eligió un discreto y sobrio look con pantalón, botines y abrigo de paño en color negro, y un sencillo jersey de punto rosa. Además, y como complemento, la it girl lució su exclusivo Baby Dior en color burdeos, valorado en casi 4.000 euros.
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