La sorprendente y última reaparición de Charlène de Mónaco (44 años) ha venido acompañada de sus primeras palabras para la prensa en mucho tiempo. La exnadadora sudafricana ha roto su silencio para arrojar un poco de luz en el tsunami de informaciones sobre su vida que llevan meses acaparando titulares en los medios de comunicación europeos. Y, según ella misma declara, nada es lo que parece.

Tras brillar como una estrella en la Monaco Fashion Week, a la que asistió con su hija Gabriella (7), habló con el diario Nice Matin y confirmó que todavía se encuentra en proceso de recuperación, lo que justificaría que se mantenga alejada de la vida pública con muy puntuales apariciones. "Mi salud sigue siendo frágil y no quiero ir demasiado rápido", empieza diciendo con total sinceridad.

Seguidamente reconoce que ha pasado por unos meses bastantes complicados: "El camino ha sido largo, difícil y doloroso. Hoy me siento más tranquila". Su mejoría es evidente, aunque todavía tiene ese halo de tristeza y fatiga en su mirada, pero las cosas parecen ir por buen camino. 

Con respecto al estado de su matrimonio, también ha sido bastante clara al responder a la ansiada pregunta de los periodistas presentes en el evento. "Ustedes quieren hablar de los rumores de divorcio o de mi nueva residencia en Suiza. Me parece lamentable que algunos medios de comunicación difundan tales rumores acerca de mi vida o de mi relación", manifestó mostrando cierto enfado.

Del supuesto acuerdo millonario que habría firmado con Alberto de Mónaco (64) y de la enemistad que mantiene con su cuñada Carolina (65) no dijo nada. Aunque breves, las primeras declaraciones de Charlène son reveladoras, como también lo es que estaba radiante y se la veía mucho más recuperada.

Quiso compartir la gran noche de su vuelta a los photocall con su hija, que debutó con su primer look de gala y acaparó los flashes. Ambas eligieron diseños del sudafricano Terrence Bray y la princesa monegasca disfrutó muchísimo vistiendo a Gabriella y viéndola tan feliz con su vestido nuevo. 

"Me ha encantado cada momento de la preparación de mi princesa para su primer evento oficial. Estamos deseando tener una gran velada en los premios de la moda", escribía en su perfil oficial de Instagram junto a una foto de ambas tomadas presumiblemente en palacio.

Tras esta aparición sorpresa que no fue anunciada, no pasará demasiado tiempo para volver a ver a Charlène en público. Será el próximo 5 de junio en la tradicional Riviera Water Bike Challenge 2022, una carrera de relevos de motos acuáticas en el puerto de Mónaco, que busca recaudar fondos para el proyecto Nademos por la seguridad. Ha sido una de sus mejores amigas quien ha confirmado su presencia, ya que el evento está patrocinado por su fundación. La duda es si la acompañará el príncipe Alberto.

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