El pasado domingo, 2 de octubre, el Palacio de Buckingham desvelaba un nuevo retrato institucional. Un posado del rey Carlos III (73 años) y su esposa, Camilla (75), acompañados por los príncipes de Gales, Guillermo (40) y Kate Middleton (40), que mostraba la 'nueva' cara de la Corona británica y al que han respondido Meghan Markle (41) y el príncipe Harry (38) con otras instantáneas en las que no han dejado ni un detalle al azar.
Solo un día después del posado oficial de los nuevos Reyes y Príncipes de Gales, el fotógrafo Misan Harriman compartía dos imágenes de los Sussex, captadas el pasado 5 de septiembre en Manchester durante el congreso One Young World, que han acaparado la atención mediática. Por un lado, por haber salido a luz tas el último retrato institucional de la Familia Real. Por otro, por el mensaje que trasmiten con la elección de sus atuendos, su postura y gestos.
La expresión facial, explica a EL ESPAÑOL Sonia El Hakim, directora del Máster en Comunicación No Verbal y Habilidades Directivas de la Universidad Europea Miguel de Cervantes, tiene menos relevancia por tratarse de retratos "posados".
La primera foto es la más llamativa. Se trata de un retrato a color en el que Meghan Markle es la gran protagonista. La actriz aparece con un estilismo en color rojo y por delante de su marido, ataviado con un clásico traje. La duquesa de Sussex se muestra con un tono que denota "fuerza" y que, en palabras de la experta, "es el más dominante de todos".
Otro punto a destacar es la postura corporal. Meghan Markle, explica Sonia El Hakim, "está totalmente orientada hacia la cámara. Se siente segura, no teme a lo que pueda pasar ni a los demás. El príncipe Harry, por su parte, se muestra más "discreto", ya que está justo detrás de mujer y ladeado.
Cristian Salomoni, criminalista experto en lenguaje no verbal y director del Instituto Internacional de análisis de la conducta, coincide y comenta a este medio que Meghan Markle, por colocarse en un primer plano y la elección de su outfit, se presenta como una mujer "fuerte, apasionada, poderosa y segura".
Es una imagen más rompedora si se compara con el anterior posado de la Familia Real. El príncipe Guillermo y Kate Middleton tienen orientaciones similares y ella aparece por detrás de él. Comenta Sonia El Hakim que esta forma de presentarse "no es ni buena ni mala" -al igual que la de Meghan y Harry-, pero muestra un patrón "más clásico".
"Meghan tiene una postura alfa, expansiva, dominante, que ocupa espacio. Incluso tiene la forma de ubicar las piernas separadas", argumenta la profesional en comunicación no verbal. Kate Middleton, con quien tiene una conocida 'rivalidad', aparece con una "postura beta, más discreta y contraída".
La duquesa de Sussex, además, reafirma su posición de mujer alfa con los gestos hápticos -relativos al tacto-. "Es Meghan quien coge el dedo de Harry, como las madres cogen a sus hijos", dice la experta.
En el retrato institucional de los Príncipes de Gales, en cambio, es Guillermo quien agarra la mano de Kate. "Es un gesto de roles masculinos y femeninos más convencional", comenta El Hakim en conversación con este periódico, insistiendo en que no se trata de una actitud "ni buena ni mala". En el caso de Meghan y Harry, "los roles no son tan convencionales. Hay una posición de dominio por parte de ella, más evidente".
La segunda instantánea de los duques de Sussex, también da mayor protagonismo a Meghan Markle. En la fotografía, en blanco y negro, ambos posan de perfil. Pero es ella quien nuevamente vuelve a ocupar el primer plano, acaparando más atención.