Tras perderse las primeras importantes citas de los Grimaldi, preocupando así a todos los monegascos, la princesa Charlène (45 años) ha reaparecido en una de los actos más especiales para el Principado. Este pasado jueves, 26 de enero, un día después de celebrar su 45 cumpleaños, la exnadadora acudió a las celebraciones en honor a Santa Devota, patrona de la nación. Lo hizo sin su marido, el príncipe Alberto (64). 

El hijo de Grace Kelly, el encargado habitual de encabezar este acto, no pudo asistir por haber dado positivo por coronavirus. Así, su mujer se convirtió en la máxima representante del Estado en acudir a la celebración. 

Quienes sí estuvieron con la Princesa fueron sus dos hijos, los mellizos Jacques (8) y Gabriella (8). Juntos cumplieron con la tradición de prender la llama de la hoguera con la que se incendia la barca en honor a la guardiana de Mónaco. Esta vez llevaron unas antorchas que recordaban a los clásicos bastones de Navidad. 

[Preocupación por Charlène de Mónaco tras ausentarse de las primeras grandes citas de 2023]

Para la ocasión, Charlène de Mónaco se decantó por un estilismo en tonos oscuros, compuesto por un traje sastre, jersey de cuello perkins, abrigo largo y guantes de piel. Jacques y Gabriella, una vez más, también destacaron por sus apuestas estilísticas. La niña, que se ha convertido en una it girl con apenas ocho años, volvió a recurrir a su chaqueta rosa de Emporio Armani, valorada en casi 500 euros. 

Más allá de sus estilismos y de haberse convertido en la gran compañía de su madre, Jacques y Gabriella acapararon toda la atención por sus gestos cariñosos. Entre los mellizos no faltaron las risas, la complicidad y un emotivo abrazo captado por las cámaras. También intercambiaron mimos con su madre. 

Las celebraciones de Santa Devota continúan la mañana de este viernes, 27 de enero, sin la presencia del príncipe Alberto. El Jefe de Estado no podrá reincorporarse porque necesita cumplir con los días de aislamiento, prescritas en el protocolo sanitario de Mónaco. Eso sí, según el comunicado que ha enviado la Casa Real, es asintomático y no representa ninguna preocupación para el resto de su familia. 

Se desconoce si este viernes se unirá otro miembro de los Grimaldi. Aunque es una de las costumbres más especiales para los monegascos, este pasado jueves no estuvieron ni las hermanas ni los sobrinos de Alberto, incluso cuando la fiesta recuperó totalmente la normalidad tras dos años de pandemia.

Charlène de Mónaco, por su parte, se ha reincorporado a la agenda institucional tras su marcada ausencia en el funeral de Constantino II de Grecia y en el Festival de Circo de Montecarlo, al que solía acudir. Su misteriosa 'desaparición', así como la reciente mudanza de sus padres a un enclave muy cerca del Principado habían desatado todo tipo de rumores.