El inicio del viaje a Angola de los Reyes se ha producido en medio de un huracán mediático provocado por dos noticias de muy distinta índole. Felipe VI (55 años) y Letizia (50) llegaban en la mañana del lunes 6 de febrero al aeropuerto para embarcar en el avión que les llevaría a Luanda, capital de la República de Angola, donde permanecerán en visita de Estado durante tres días. No viajan solos, van acompañados por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares (50), y la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez (45).
La Reina, vestida con su abrigo batín negro de Caroina Herrera, que ya ha lucido en varias ocasiones, pantalones sastre y jersey de cuello vuelto fucsia, ha elegido nuevamente unos zapatos cómodos con los que mitigar su dolencia de pies: unas botas de tacón cuadrado de estilo masculino. El Rey, de traje, pero con una corbata colorida en tonos también rosados.
Tras la despedida oficial, que ha durado solamente unos minutos pues este tipo de actos son breves y muy protocolarios, ambos han embarcado en el A-310, uno de los aviones VIP del 45 Grupo del Ejército del Aire utilizado para el transporte de la Familia Real y el Gobierno. Este viaje supone su estreno en el África subsahariana y la primera ocasión en la que un monarca español pisa la que fue colonia portuguesa hasta 1975.
La partida de los Reyes coincide con un momento bastante activo a nivel mediático. Primero porque ha sido el día elegido para Casa Real para anunciar que la infanta Sofía (15) estudiará en el internado de Gales el curso que viene, siguiendo los pasos de su hermana mayor. Ya ha pasado con éxito las pruebas necesarias para ingresar en el UWC Atlantic College y está previsto que curse un programa académico, que se desarrolla en dos cursos (2023-24 y 2024-25) y que comprende tanto materias de ciencias como de letras.
Un sueño hecho realidad para la hija mejor de Letizia que, según algunas informaciones, "se moría de ganas" por estudiar en el mismo centro que Leonor (17). Empezará para ella una emocionante etapa de su vida, lejos de Zarzuela y de sus padres por primera vez.
Menos feliz y muy polémica es otra de las noticias que acapara la atención este lunes y tiene como protagonista a Froilán (24), que nada más volver de Abu Dabi donde ha pasado una corta temporada con el Emérito ha vuelto a protagonizar un escándalo. Esta vez, al encontrarse en un local que tuvo que ser desalojado el pasado domingo 5 de febrero y donde había presencia de menores de edad y sustancias estupefacientes. Un nuevo quebradero de cabeza para su madre, la infanta Elena (59) y también para la Familia Real.