El 29 de abril de 2011 llegaba un nuevo miembro a la Casa Real británica a través de su matrimonio con el príncipe Guillermo (40 años) y hoy, doce años más tarde, se ha convertido en uno de los más valorados. Kate Middleton (41) celebra su aniversario de boda en un ambiente menos romántico de lo que se esperaría debido a los frentes abiertos que tiene en el seno de su pareja y también a nivel familiar.
No es una fecha redonda, pero la pareja ha querido compartir una nueva foto de ambos en sus redes sociales con un gesto alusivo a su amor. "12 años", han escrito los Príncipes de Gales junto a una bonita instantánea de ambos que deja a un lado los formalismos y muestra su imagen más cercana y natural. Kate y Guillermo posan muy sonrientes para el fotógrafo Matt Porteous mientras disfrutan de un paseo en bicicleta.
El año pasado no compartieron ningún recuerdo, pero sí en su décimo aniversario y también en el noveno. En 2020, subieron una imagen de su enlace con el siguiente mensaje: "Hoy hace nueve años: ¡gracias por todos sus encantadores mensajes en el aniversario de boda del duque y la duquesa de Cambridge!".
Este 2023, con más razón se ha de reforzar su imagen pública de felicidad, después del difícil trance por el que han pasado como pareja por los rumores de infidelidad del príncipe con Rose Hanbury, una exmodelo y amiga de ambos. El supuesto romance extraconyugal salió a la luz en 2019, cuando fue desmentido a través de un comunicado, pero volvió a tomar relevancia el pasado mes de febrero después de que algunos medios publicaran que el heredero y Rose habrían tenido una cita de San Valentín.
Este aniversario nupcial llega, además, en un momento relevante. Sólo siete días después, los Príncipes de Gales aparecerán juntos y desempeñando un rol destacado en la coronación de Carlos III (74). Aunque siempre se muestran unidos y cariñosos en público, la ceremonia del Rey despierta viejos fantasmas que hacen que esta cita sea un reto para Middleton.
Todavía resuenan los rumores de aquella presunta deslealtad cuando se acerca el reencuentro de la princesa y Rose Hanbury. La exmodelo está muy relacionada con la corona inglesa, tanto por ser nieta de una antigua compañera de juegos de Isabel II, Lady Elizabeth Longman, como por su matrimonio con David Rocksavage (62), el séptimo marqués de Cholmondeley, que es un alto funcionario retirado de la Casa Real. Esto hará que sus caminos vuelvan a cruzarse el 6 de mayo en la abadía de Westminster para la coronación.
El motivo es la participación del hijo de Rose en la ceremonia, pues es uno de los pajes que acompañarán a los Reyes de Inglaterra en el gran día. Se espera que los padres del adolescente de 13 años llamado Oliver también asistan, lo que hará que la Princesa de Gales y la supuesta amante de Guillermo se vean las caras. Aunque han negado categóricamente la veracidad de este supuesto affaire, no ha sido un trance difícil de encajar para la princesa. Eso sí, como buena profesional de la Corona que es, jamás ha dado muestras de abatimiento o enfado.
Sus adeptos, que son muchos, esperan verla aparecer radiante en el templo con uno de esos estilismos impecables que suele lucir. La estilista Miranda Holder hace sus apuestas en la prensa británica: "Va a usar un vestido increíble. Apostaría que será un Jenny Packham o un McQueen, ya que son las dos firmas británicas a las que ella recurre para estas ocasiones. Estoy segura de que lo modificará para que se adapte a ella".
No es la única tensión en el ambiente. La presencia del príncipe Harry (38) en la coronación es complicada para los Príncipes de Gales. Tal y como afirman los medios británicos, no hay posibilidad de que haya una reunión entre ellos para tratar de solucionar las cosas. "No tienen planes para un encuentro de reconciliación", dicen fuentes cercanas a palacio en The Sun. Además, el duque de Sussex se sentará bastante detrás del resto de la Familia Real en la abadía, no más cerca de la fila décima, lo que evitará cualquier contacto con los Windsor y lo relegará a un casi oculto segundo plano.
Con este panorama, los Príncipes de Gales tratan de que mantener la calma y la positividad y celebrarán su día especial, este sábado 29 de abril, en la intimidad. Desde que salieron a la luz los rumores sobre una posible crisis entre ellos se han esforzado en mostrar su complicidad en sus actos oficiales. Aparecieron más cariñosos que nunca en la gala de los premios Bafta, en pleno huracán Rose Hanbury, y luego se han dejado ver gastándose bromas sobre una bicicleta estática, haciendo maniobras militares juntos, practicando escalada, etc. Siempre divertidos y presumiendo de complicidad.
Kate Middleton y el príncipe Guillermo quieren mostrar que 12 años después de su enlace siguen siendo un matrimonio unido y estable, aunque descartan ampliar la familia. En un acto reciente de la agenda de la Princesa de Gales, que visitó The baby bank en Windsor, una institución benéfica para proveer de todo lo necesario para los niños a familia sin recursos, dio la clave al confesar que no se veía empezando de nuevo el proceso de los pañales y los biberones.