El pasado 7 de junio, la reina Letizia (50 años) presidió en Madrid la clausura de la XV Convocatoria de Euros de tu Nómina, una iniciativa de Banco Santander para impulsar proyectos que mejoran la sociedad. Tras pronunciar su discurso, tuvieron lugar distintos corrillos, clásicos momentos de conversación breve entre Su Majestad y los involucrados en el acto.
De manera absolutamente espontánea, la esposa del rey Felipe (55) recibió el aviso de que alguien quería saludarla y hacerle entrega de algo. Ella era Marta Bustos Góngora, autora del libro Cuando perdí mis ojos marrones; una estrella de las redes sociales, lugar en el que ha encontrado un refugio para transmitir a sus seguidores cómo es el día a día de una persona que, de la noche a la mañana, pierde la visión por un fatal accidente doméstico.
Letizia agradeció sobremanera que Marta le regalase su libro, pero lo quería dedicado: esa era su obsesión. "Me encantaría que me lo dedicaras. Si quieres y si puedes", le comentó Su Majestad. "Búscame, dedícamelo y tráemelo", le pidió. La autora, que no da crédito a lo que está pasando responde rápidamente que sí y propone dárselo al responsable de seguridad que acompaña a la Reina. "No, me lo das a mí", le espeta Letizia, causando la risa de ambas y del entorno que estaba presenciando la escena. A continuación, añadió: "Me haría mucha ilusión que me lo devolvieras dedicado. No me voy".
EL ESPAÑOL ha descubierto ahora que no es la primera vez en los últimos meses en que Letizia deja al descubierto no sólo su pasión por la literatura -y el agradecimiento por aquellos autores que le obsequian con sus obras-, sino también por atesorar libros dedicados por aquellos que los escribieron.
El pasado 13 de abril, con la llegada de la radiante primavera a nuestro país, la Reina viajó hasta Córdoba para presidir el acto de proclamación del Premio de Artes y Letras, en la tercera jornada del Tour del Talento, vinculado a la Fundación Princesa de Girona. En el momento en que la esposa del jefe del Estado se acerca a saludar a los curiosos que la esperaban a las puertas de La Real Colegiata de San Hipólito, una mujer se presenta y acapara la atención de la Reina.
"Soy Begoña M. Rueda, la poeta más premiada de mi generación. Puede buscarme. Encantada de conocerla", comenta la escritora justo después de haberle entregado su libro. "¿Y ahora que estás haciendo?", pregunta Letizia, a lo que la poeta responde, "ahora mismo sigo escribiendo y sigo con mi obra y con muchas ganas de continuar siempre en la literatura". "Enhorabuena por el premio y qué bonita ha quedado la edición. ¿Me lo has dedicado?", cuestiona Letizia, a la que, tal y como se puede comprobar en éste y en el vídeo viral de hace unos días, adora tener libros dedicados por quienes lo idearon y lo plasmaron negro sobre blanco.
"¡No he tenido tiempo, pero tengo un boli!", replica, apurada, Begoña. "Dedícamelo", dice la Reina haciendo con las manos el gesto clásico que expresa una petición (por favor). "Me encanta el regalo, pero dedicado tiene mucho más valor... que ya lo tiene. Me lo dedicas. Gracias, Begoña. Tómate tiempo, tienes tiempo. No hace falta que... ahora una persona de seguridad lo recoge", concluye Letizia, ilusionada por el hecho de que antes de emprender su viaje de vuelta a casa tendrá entre sus manos un libro de poemas dedicado por su autora.
EL ESPAÑOL se ha puesto en contacto con la jiennense Begoña M. Rueda para conocer de primera mano cómo sucedió aquella bonita anécdota y si ha tenido algún tipo de respuesta por parte Letizia tras leer su libro de poesías. La autora, en cambio, ha declinado conceder declaraciones que tengan que ver con la Reina. "No voy a responder absolutamente a nada que tenga que ver con la Reina. El vídeo que me comentas es una tontería que realmente tiene poco que ver con mi carrera literaria", ha sentenciado la laureada escritora.