No corren buenos tiempos para el príncipe Harry (38 años) y su esposa, Meghan Markle (41), a nivel sentimental. El matrimonio estaría atravesando una grave crisis en su historia de amor. No sólo esto: el divorcio sería inminente. Cuentan los medios británicos que Harry y Meghan están cada día más distanciados y que apenas si hacen planes de pareja.
Los padres de Archie (4) y Lilibet, después de cinco años de matrimonio, se hallarían al borde de la separación. Una de las razones que se esgrimen en estos días en los tabloides británicos es que la pareja no ha realizado ningún tipo de celebración por el quinto aniversario de su boda. Poco o nada parece quedar de aquel amor que se juraron el 19 de mayo de 2018, en la capilla de San Jorge del castillo de Windsor.
Pese a esa unidad que demostraron públicamente en el documental, haciendo frente común a todas las adversidades y los escándalos con la Familia Real británica, el amor entre Harry y Meghan estaría naufragando. En esa línea, se ha conocido en las últimas horas que la familia de él habría presionado al duque para que terminase de tomar la decisión de divorciarse de Meghan y poder regresar a Reino Unido.
En esa dirección, también se ha asegurado que en el último intento de reconciliación familiar, durante el entierro de la reina Isabel II, el actual rey de Inglaterra, Carlos III (74), y su primogénito, Guillermo (41), le habrían hecho saber a Harry que no están dispuestos a tolerar más escándalos.
Sea como fuere, los rumores de crisis entre Harry y Meghan suman y siguen. Según algunos medios han advertido, ya no hay vuelta atrás en esta separación. El divorcio, pues, se vislumbra como la única opción para que el duque de Sussex pueda recuperar sus tareas como miembro de la Familia Real.
El entorno de la Familia Real británica ha comenzado a dar su versión de este divorcio que se prevé inminente. Tom Bower, periodista y biógrafo, ha concedido unas declaraciones en el Daily Mail, insistiendo en que el divorcio está mucho más avanzado de lo que ha trascendido públicamente. "Hay mucha gente en Londres que opina que Meghan se está cansando de Harry", ha aseverado.
A la luz de la opinión de Bower, Harry y Meghan ya hacen vida por separado en Montecito, Santa Bárbara, donde tienen la casa conyugal. "Ha encontrado definitivamente su sitio y está muy asentado en California, pero echa de menos su hogar", ha agregado en The Telegraph el que fue maquillador y examigo de la actriz.
Sin contrato con Spotify
En los últimos días se ha conocido que la plataforma de internet Spotify ha puesto fin al contrato que tenía con los duques de Sussex para producir pódcast, según ha confirmado la empresa y la pareja en un comunicado conjunto.
En la nota se especifica que ambas partes han "acordado mutuamente separar sus caminos", con lo que Spotify no renovará para una segunda temporada, como se esperaba, Archetypes de Meghan, que lleva emitiendo doce capítulos desde agosto de 2022.
Cuando se anunció ese contrato, a finales de 2020, tenía un valor estimado de unos 25 millones de dólares -29 millones de euros-, según los medios, y fue uno de los acuerdos comerciales más importantes fraguado por la pareja tras haberse apartado de sus funciones como miembros de la familia real británica y mudado a Estados Unidos.
Cuando se anunció hace tres años, el príncipe Harry señaló que aportaría "perspectivas y voces diferentes que quizás no se hayan oído antes". En la primera serie, Meghan habló con figuras conocidas como su amiga la tenista Serena Williams (41) y la cantante Mariah Carey (54) acerca de estereotipos contra las mujeres.
La duquesa indicó entonces que le encantaba "implicarse" en el proceso de "sentarse hasta tarde por la noche en la cama, trabajando en el texto y la creatividad". Meghan reveló además que le "encantaba ahondar en conversaciones significativas" con sus "invitados diversos e inspiradores, riendo y aprendiendo" con ellos.
Una portavoz de Archewell -la organización de los duques- indicó al Wall Street Journal que Meghan continúa desarrollado contenido para su audiencia en otra plataforma. Los medios norteamericanos sugieren que la pareja no ha cumplido con las expectativas de productividad requeridas por Spotify.