El rey Carlos III continuará su tratamiento contra el cáncer en 2025: desde Buckingham desvelan cómo se encuentra
- Según una fuente del Palacio de Buckingham, "su tratamiento ha avanzado en una dirección positiva". Predomina un sentimiento de optimismo.
- Más información: Guillermo y Kate Middleton felicitan la Navidad junto a sus tres hijos y con una significativa fotografía para la Princesa.
El rey Carlos III (76 años) continuará en el nuevo año su tratamiento contra el cáncer que padece, del que no se ha facilitado información, se ha indicado este viernes, 20 de diciembre, el canal informativo Sky News.
Según una fuente del Palacio de Buckingham citada por la televisión, "su tratamiento ha avanzado en una dirección positiva y, como enfermedad controlada, el ciclo de tratamiento continuará el próximo año".
La misma fuente añade que predomina un sentimiento de optimismo sobre la dolencia del monarca, que se evidencia en su deseo de continuar con su cargada agenda pública a lo largo de las navidades.
El pasado febrero el Palacio informó que de Carlos III había sido diagnosticado de cáncer, aunque no detalló de qué tipo ni su pronóstico. Tampoco se ha revelado cuál es el tratamiento que está siguiendo el Rey para luchar contra el cáncer.
La Familia Real británica cerrará este 2024 uno de sus años más aciagos, con la enfermedad que sufre el monarca, pero también su nuera, la princesa de Gales, Kate Middleton (42), quien anunció en septiembre que ha completado su tratamiento con quimioterapia contra el cáncer que le fue diagnosticado en enero y cuya naturaleza también se desconoce.
Pese a este aciago escenario, hay una sensación de ánimo respecto a meses anteriores. "Ha sido un momento muy difícil y desafiante, pero la sensación es que han superado el shock y lo peor. Todos se sienten muy optimistas con el 2025", ha informado Vanity Fair.
Por ello, Carlos y Camila ejercerán de anfitriones de una celebración histórica y significativa por Navidad, el próximo 24 de diciembre. Un festejo al que asistirán Guillermo y Kate Middleton junto sus tres hijos, George (11), Charlotte (9) y Louis (6). Todo apunta a que los duques de Sussex y sus dos vástagos volverán a ser los grandes ausentes en Sandringham.
La ausencia de Andrés
El príncipe Andrés (64), hermano del rey Carlos III, no pasará la Navidad con la Familia Real británica en su mansión de Sandringham para no atraer la atención, a raíz de la polémica por su amistad con un cuestionado empresario chino, ha informado la BBC.
Fuentes de la realeza han indicado a la cadena pública que se espera que el duque de York deje de participar en todos los eventos familiares, a fin de evitar "ser una distracción", dado el interés mediático por sus conexiones con el presunto espía Yang Tengbo.
Aunque está retirado de la vida pública desde 2019 por varios escándalos, Andrés solía compartir la Navidad y asistir a misa con otros miembros de la familia en la mansión privada que tienen en el condado inglés de Norfolk.
Es tradicional que los Reyes y los príncipes de Gales y sus hijos, así como otros parientes, vayan dando un paseo a la capilla cercana, entre el júbilo de miembros del público que se acercan a verlos.
Se desconoce por ahora si el duque de York asistirá al almuerzo prenavideño que el soberano prevé organizar este jueves con familiares más lejanos en el londinense palacio de Buckingham. De acuerdo con la prensa, sus hijas, las princesas Beatriz (36) y Eugenia (35), ya tenían planeado pasar el día de Navidad con sus familias políticas por primera vez.
El príncipe Andrés vuelve a estar en el centro de la controversia tras conocerse que dejó entrar en su círculo íntimo al empresario chino Yang Tengbo, a quien el Gobierno británico denegó la entrada al Reino Unido en marzo de 2023 al considerar que, en parte por sus lazos con el duque, suponía un peligro para la seguridad nacional.
El segundo hijo varón de Isabel II aseguró el pasado viernes que cesó todo contacto con Yang, a quien invitó a su cumpleaños en 2020 y autorizó a representarle ante inversores chinos, cuando fue advertido por el Gobierno.
Este emprendedor de 50 años, que residió durante dos décadas en territorio británico, ha negado este lunes que sea un espía y que cometiera "nada malo o ilegal", y alega que es una víctima de las desavenencias políticas en el Reino Unido.
"Cuando las relaciones son buenas y se buscan inversiones chinas, soy bienvenido en el Reino Unido. Cuando las relaciones se deterioran, se adopta una postura antichina y me excluyen", ha dicho en un comunicado. Yang ha adelantado que piensa recurrir el fallo judicial del 12 de diciembre que ratificaba el veto de entrada que le impuso en 2023 la entonces ministra del Interior, Suella Braverman.