Cuando el pueblo llano aún no se ha repuesto del divorcio de Angelina Jolie (41 años) y Brad Pitt (52) y de la separación de Naomi Watts (48) y Liev Schreiber (49), un nuevo golpe sentimental azota el panorama artístico. Paulina Rubio (45), cantante de temas como El último adiós, habría seguido a pies juntillas la letra de su canción y habría puesto punto final a su relación con Gerardo Bazúa (31), con el que mantiene una relación desde hace tres años y con el que tiene un hijo en común llamado Eros.
Según apuntan varios medios latinoamericanos, la chica dorada ha descubierto que su novio le ha sido infiel no una ni dos, sino varias veces. Las sospechas la llevaron a revisar las conversaciones de WhatsApp de Bazúa, que vinieron a confirmar lo que se temía: conversaciones subidas de tono y fotografías intercambiadas con otras mujeres.
El descubrimiento de Paulina Rubio ha colmado un vaso que comenzó a llenarse con otra infidelidad anterior que la cantante perdonó. De ahí que esta vez haya decidido, ante la reincidencia de su pareja, cortar la relación por lo sano. La prensa mexicana habla de "ruptura definitiva" y afirman incluso que la artista habría echado de su domicilio a Bazúa.
Por el momento, ninguno de los protagonistas ha querido pronunciarse sobre el suceso.
La última vez que se les vio juntos y felices fue durante la boda de Rocío Carrasco (39) y Fidel Albiac (43). La novia entregó entonces el ramo a su amiga mexicana, lo que la convertía en la siguiente en pasar por la vicaría, algo que, al menos por el momento, tendrá que esperar.
La mala suerte de la chica dorada
2016 no ha sido el año de Paulina Rubio (45 años) ni en lo profesional ni en lo personal.
Ya en verano, la cantante fue blanco de las críticas debido a sus actuaciones en concierto. El pasado mes de julio, concretamente, su escasa afinación unida a la decisión de actuar sobre el playback y su desmejorada figura fueron objeto de todo tipo de comentarios negativos a los que la artista hizo caso omiso.
Tampoco en el amor ha tenido suerte en los últimos tiempos. Con los hombres que han pasado por su vida no ha tenido un final cordial precisamente. Tras una larga relacion con Ricardo Boffil, la mexicana mantuvo un breve idilio con José María Torre. Después llegó Nicolás Vallejo Nágera (44), Colate, con el que mantiene una larga batalla judicial a cuenta de su divorcio y, sobre todo, de la custodia del hijo de ambos.
Habrá que esperar para conocer si también en esta ocasión la custodia del pequeño Eros enfrenta a sus padres en los juzgados o si por el contrario la pareja, que se conoció en la versión mexicana del programa La voz -él concursaba y ella era coach, decide darse una tercera oportunidad.