La mujer de Harvey Weinstein recibirá 12 millones de dólares tras su divorcio
Georgina Champan, diseñadora y actriz británica, solicitó esta medida legal después de las múltiples denuncias de acoso recibidas por el famoso productor.
19 diciembre, 2017 18:13El escándalo Harvey Weinstein (65 años) sigue trayendo consecuencias en Hollywood. ¿La última? El divorcio del exproductor y la diseñadora Georgina Chapman (41), que promete ser bastante rentable para esta última. Concretamente, unos 12 millones de dólares, según el portal estadounidense TMZ.
El acuerdo prenupcial que firmó la británica ha dado un nuevo giro tras cumplirse 10 años de casados. Aunque es cierto que no tienen nada que celebrar, si Georgina se divorcia ahora de Harvey recibiría 4,75 millones de dólares, y es que por los cinco primeros años de matrimonio recibe 250.000 dólares por cada uno, mientras que por los otros 5 años esta cifra asciende hasta los 700.000 dólares.
A esta cantidad hay que añadir la manutención conyugal de los dos hijos que tienen en común, que según este acuerdo prenupcial quedaba fijada en otros 4 millones dólares. Además, se había estipulado una asignación de vivienda que actualmente queda cifrada en 3 millones de dólares.
Es decir, gracias a todos estos años de casada la diseñadora recibirá una cantidad cercana a los 12 millones de dólares. Una cifra que podría seguir incrementándose si Georgina permanece junto al exproductor un año más, momento en el que en vez de 700.000 dólares por año, Harvey tendría que desembolsar 1 millón de euros por año de casados.
El divorcio está en trámites
El 10 de octubre Georgina anunció que dejaría a Weinstein después de que se hicieran públicas las informaciones que acusaban a Harvey Weinstein de diversos casos de acoso sexual. Según declaró entonces la diseñadora al medio estadounidense People, estaba muy afectada por estas noticias y le dolía "el corazón por todas las mujeres que han sufrido".
Weinstein confirmó entonces estas informaciones, asegurando que habían "discutido la "posibilidad de una separación y le alenté a hacer lo que estaba en su corazón. Al final, ella tomó la decisión de separarse". Al parecer, la propia diseñadora aseguró que no podía olvidarse de estas acciones "imperdonables".
Por el momento, Georgina ya ha contratado a uno de los mejores abogados de divorcios de Nueva York. Aunque todavía no se han presentado los documentos, ya se están organizando ciertos trámites.
Asimismo, han salido a la luz ciertos puntos del acuerdo prenupcial que son interesantes. Uno de ellos es la "cláusula mordaza" que estipula que ninguno de los dos pueden publicar diarios, memorias, cartas, historias, fotografías o hacer entrevistas que se refieran a su negocio personal o de asuntos financieros.
La pareja se casó en 2007 y tienen dos hijos juntos, de 7 y 4 años. Además, Weinstein tiene otros tres hijos de un matrimonio anterior.
Georgina Chapman, la diseñadora detrás de Harvey
Aunque ahora el nombre de Georgina Chapman es conocido a raíz del escándalo de Harvey Weinstein, lo cierto es que detrás del nombre hay una gran profesional. Es una diseñadora de moda y una actriz inglesa que, junto a la exmodelo Keren Craig, es cofundadora de la marca Marchesa en 2004. Gracias a esta firma de ropa la británica tiene una riqueza estimada de 17 millones de euros.
Sus diseños se basan, fundamentalmente, en ropa de mujer de alta gama, y es que muchas de sus prendas han sido elegidas por las estrellas de Hollywood para la alfombra roja.
Pese a que su nombre se asocie tan fuertemente con el de Weinstein, y el boicot explícito promovido desde algunos sectores de la industria cinematográfica en solidaridad a las víctimas, la marca de Georgina volverá a la semana de la moda en Nueva York el próximo febrero.
El escándalo ha afectado tanto a su vida personal como profesional. Por un lado, hay quienes opinan que Georgina no debe sufrir el mismo escarnio que su exmarido, pues asguran que el no tuvo nada que ver con los actos de este. Por otro lado, hay quienes sí atacan a la marca pues identifican en ella y en su largo silencio una cómplice necesaria de las presuntas atrocidades de Weinstein.