Rod Stewart cumple 80 años en plena forma: su intensa vida y una fortuna de 300 millones de dólares

A principios del año pasado, Rod Stewart vendió su catálogo musical al grupo inversor Iconic Artists Group por 100 millones de dólares, empresa que también posee el repertorio de Cher, Nata King Cole o Dean Martin (también incluye material de archivo). En total, y siempre según el portal Celebrity Net Worth, la fortuna del británico ascendería a 300 millones de dólares.

Este viernes 10 de enero, el intérprete de clásicos como All for Love y Forever Young llega a los 80 en plena forma. Lejos de pensar en la jubilación, el crooner de los 70 está enfrascado actualmente en una gira a ambos lados del Atlántico que le lleva por Hollywood, Las Vegas, Toronto, Malmö, Bremen, Cracovia. Su último concierto en España fue el pasado 15 de diciembre en A Coruña.

Es el último de los cinco hijos de un matrimonio de clase media y el único nacido en Inglaterra ya que los otros lo hicieron en Escocia. De pequeño parecía predestinado a jugar al fútbol profesional, fue capitán del equipo de la escuela, hizo las pruebas en el Brentford de tercera división, coleccionaba cromos de deportistas escoceses y era un forofo seguidor del Arsenal. Pero sus sueños se evaporaron ya que el club jamás volvió a contactar con él.

Concello da Coruña

Rod Stewart en A Coruña: una noche sexy en el Coliseum y versiones contra el paso del tiempo

El cantante en el jardín de su casa en 1971. Getty Images

Al dejar la escuela con 15 años realizó trabajos tan variopintos como repartidor de periódicos, rotulista, montador de vallas, ayudó con la tienda familiar e incluso fue peón en el cementerio de su barrio. La otra opción que le quedaba a aquel joven inquieto era la música, una afición que compartía en casa junto a su familia. Escuchaban a Al Jolson y tocaban sus canciones, con mucho más ahínco cuando el padre de Rod le regaló su primera guitarra, y también le influyó el rock & roll de Little Richard.

Sus primeras andanzas musicales a principios de los sesenta fueron con The Raiders y The Ray Davies Quartet y luego se unió al músico folk Wizz Jones, junto al que fue detenido hasta en tres ocasiones por manifestarse en la calle contra las armas nucleares. Sorprendió a muchos cuando confesó que "solía ir a esas marchas para follar. En realidad no me importaba la guerra" y reiteró que aquella situación era algo asquerosa porque "tenías que usar pantalones de pana durante meses, realmente apestaban, no cambiarte los calzoncillos… Era asqueroso". En una de esas se vieron inmersos en el universo beatnik, Rod ya tenía casi depurada su imagen pública con el pelo largo cortado de forma escalonada y desaliñado que luego desembocaría en su característico peinado parecido a una cresta de gallo.

Junto a Wizz tocaban por las calles de Inglaterra y con el poco dinero conseguido viajaron a París, donde llegaron a dormir bajo los puentes del Sena. Posteriormente se dirigieron a Barcelona con tan poca fortuna que allí se le aplicó la ley de vagos y maleantes por dormir en la calles y fue deportado. De vuelta a Inglaterra estuvo en el Jeff Beck Group y después en los Small Faces, pero lo que realmente quería Stewart era volar por su cuenta. Finalmente, lo consiguió en 1964 al firmar en solitario con Decca Records.

Durante uno de sus conciertos.

Para entonces ya se había convertido en padre primerizo de Sarah (62) fruto de una breve relación con Susana Boffey. Pero debido al tipo de vida que llevaba a su primogénita la criaron sus padres adoptivos. Antes de su primer matrimonio con Alana Collins (79) en 1979, tuvo varias relaciones, siendo la más destacable la de la actriz sueca Britt Ekland (82) -exesposa del intérprete Peter Sellers- quien después de dos años decidió finiquitar la relación en 1977 porque él le había puesto los cuernos.

De 1979 a 1984 estuvo con Alana, quien previamente estuvo casada con el eterno galán bronceado George Hamilton (85). Rod y Alana tuvieron dos hijos, Kimberly (46), que les convirtió en abuelos en 2011 tras el nacimiento de una niña con el actor Benicio del Toro (57), y Sean (45), uno de sus descendientes más conflictivos que ha tenido problemas con la justicia. De hecho, ambos estuvieron involucrados poco antes de la pandemia en un incidente en Florida que se resolvió privadamente antes de llegar a juicio.

Alana sigue siendo una mujer a la que le gusta la vida social, algo que solía desquiciar a Rod, ya que no le gustaban las fiestas caseras llenas de celebridades. Su consumo de drogas le hacía perder el control y se marchaba del hogar conyugal.

Rod Stewart con el rey Carlos III. Getty Images

Afincado en Los Ángeles, Rod decidió darle un giro a su repertorio de blues, soul y rock y se pasó a la música disco con Blondes Have more Fun (1978), que no tuvo mucho éxito de crítica. Y para seguir rizando el rizo, poco después el brasileño Jorge Ben Jor le acusó de plagio por el éxito Da Ya Think I’m Sexy?. Tras aceptar que había sido de forma inconsciente donó parte de los beneficios a Unicef. Su estilo discotequero duró hasta mediados de los ochenta, donde volvió a sus raíces del rock sacando al mercado Every Beat of My Heart (1986) y Out of Order (1988).

La vida personal del artista seguía siendo alocada por su infinidad de amantes. Después de siete años la modelo norteamericana Kelly Emberg (65), con quien tuvo a su hija Ruby (38), le dejó en 1990 por un tema de sábanas. De hecho, una de las personas con las que le puso los cuernos fue Kelly LeBrock (64), la conocida protagonista de La mujer de rojo (1984). Poco después llegaría Rachel Hunter (55), modelo, actriz y presentadora veinticuatro años más joven que él con quien estuvo casado de 1990 a 2006, de cuya relación nacieron Renee (33) y Liam (31). La familia vivió en una espectacular mansión de 2.500 metros cuadrados en la elitista urbanización angelina Beverly Park que en la actualidad sigue en venta por 74 millones de dólares.

Junto a Rachel celebró su entrada en el Libro Guinness de los Récords al cantar ante 3,5 millones de personas en la playa de Copacabana en Río de Janeiro en la fiesta de año nuevo de 1994.

El intérprete junto a su última mujer, Penny Lancaster. Getty Images

Desde 2007 está felizmente casado con la exmodelo y fotógrafa Penny Lancaster (53) quien en 2021 sorprendió a la opinión pública al convertirse en agente de policía de Londres cuyo servicio más importante tuvo lugar como miembro de la seguridad durante la coronación de Carlos III (76). Con ella, el cantante tiene dos hijos, Alastair (20) y Aiden (14). Todos residieron durante ciertas temporadas en una mansión del siglo XIX en la campiña inglesa.

Entre los honores más importantes en la trayectoria de Rod Stewart destaca su ingreso en el Salón de la Fama del Rock and Roll y haber sido nombrado Comendador de la Orden del Imperio Británico. Su último álbum de estudio es Swing Fever (2024).