Según reveló un sondeo de Ipsos publicado el pasado marzo, el 27% de los franceses considera que un violador es menos culpable si su víctima vestía de forma atrevida. Un grupo de estudiantes de la Escuela Superior de Comercio de Dijon reaccionó con la siguiente propuesta: posar con distintos atuendos en el centro de la ciudad e invitar a los transeúntes a que identificaran con un post-it cuál de ellas era la "más provocativa". Al mismo tiempo, sus conversaciones estaban siendo grabadas.
La pregunta tenía trampa, y giraba en torno al propio concepto de "provocativa": la idea de que una mujer, por su forma de vestir, incite y disculpe las agresiones sexuales. Las organizadoras imaginaban que la joven en top sería la que acaparase los post-its sobre su piel desnuda, sin que los participantes reparasen en los eslógans que portaban las demás chicas: "Merezco que me agredan por mi forma de vestir? Cada 40 minutos se denuncia una violación en Francia. El 91% de las víctimas son mujeres".
Lo que les sorprendió, según revelaron a Le Figaro, fue lo rápido que entraron las mujeres en el juego en comparación con la timidez de los hombres, y cómo sus palabras confirmaban la percepción social de que una mujer puede "provocar" con su cuerpo la agresión sexual.
"Te lo estas buscando si te vistes así", se oye decir a una jovencita. "No nos merecemos ser agredidas, pero nos agreden", lamenta una mujer de mayor edad. Una tercera muestra más determinación: "Que nos hagan eso es inhumano. Vaya como vaya vestida, no es normal que a una mujer le hagan eso" - declara. "El que hace eso es un cabrón". "El problema no es de las chicas sino de los chicos" - opina otra.
"Si se viste como la segunda [en referencia a la chica que sólo muestra el ombligo] pues mejor, pero ella [la chica en top] se lo está buscando..." - considera otra joven. "No hay que pasarse", confirma su amiga. "Yo no digo que justifique la violación pero puede atraer una agresión, voilá" - zanja una mujer de mediana edad.
"Yo no considero a nadie provocativo y por lo tanto no voy a poner post-it" - declara otra, convencida. Una de edad avanzada apunta en dirección contraria argumentando que "los hombres tienen pulsiones que nosotras no tenemos, eso es todo, hay que tenerlo en la cabeza".
"Nadie es provocativo" - declara el único hombre que se anima a participar y que entrega su post-it a la estudiante que, precisamente, invita a señalar a la 'más provocativa'. "Todos merecemos respeto". Pero es la opinión minoritaria. "No nos lo merecemos" - concluyen las voces de mujer. "Pero enseñar nuestro cuerpo es provocar".
Noticias relacionadas
- Así escogí ser una 'mala madre' en lugar de una mamá desaparecida
- Esto ocurre cuando un gitano real ve a los gitanos de la televisión
- Así de feliz es una infancia sin móvil ni televisión
- Lo que pasa cuando te metes con el aumento de peso del protagonista de 'Prison Break'
- Por qué debes poner una fotógrafa en tu parto