Al norte de Gales, en un polígono industrial, los multimillonarios han encontrado un auténtico paraíso. Es uno de los pocos lugares del mundo donde se pueden adquirir los muebles y artículos más extravagantes. Aptos sólo para el bolsillo de unos cuantos afortunados. Tronas de elefante por más de 90.000 euros o una mesa de café hecha a medida por el precio equivalente al de una casa cerca del campo de golf de la ciudad de Wrexham (300.000 euros) son solo algunos de los costosos caprichos de sus clientes.
"Atendemos a un grupo extremadamente pequeño de personas que entienden el diseño y saben lo que quieren", aseguró su propietario Mark Boddington a The Times. "Esto no es para las esposas de los futbolistas de Cheshire". Así, por ejemplo, la trona de elefante forma parte de una serie de sillas altas encargadas por un financiero estadounidense y su esposa como un regalo para su primer nieto (las otras sillas incluyen un mono, una jirafa y flamencos).
"Estas personas tienen cantidades ilimitadas de dinero. Quieren poseer cosas que son únicas y no se pueden comprar en ningún otro lugar del mundo. Es por eso que vienen aquí".
Pero no todos lograr cumplir sus deseos. Como anécdota Mark Boddington relató al citado medio que una vez un multimillonario quiso que le hicieran una cama doble con una palanca que separara las dos mitades cada vez que tuviera una discusión con su esposa. "No hicimos la cama de separación. Eso hubiera sido incorrecto".
Algunos de los materiales exclusivos que utiliza en sus creaciones son roble pantanoso semifosilizado, conservado durante más de 3.000 años; Piel de reno de 232 años; y pieles de pescado secas. Las maderas más convencionales incluyen el ébano de Makassar, el nogal americano y el sicómoro inglés ondulado.
Una historia de éxito
En 1985, el joven artesano Mark Boddington creó Silverlining con la visión de convertirse en uno de los principales fabricantes de muebles de Gran Bretaña. Estableció una tienda en un establo de vacas en desuso en su condado natal de Cheshire. Casi tres décadas después, los innovadores y galardonados muebles de Silverlining se pueden encontrar en palacios, museos, galerías, oficinas corporativas, residencias y yates de todo el mundo.