El cabello rizado presenta unas características propias que lo hacen diferente, de ahí que deba ser tratado con unas pautas específicas que permitan no solo cuidarlo adecuadamente, sino realzar su belleza. Este es el origen del método curly, creado por Lorraine Massey, para conseguir unos rizos preciosos de forma natural.
El auge del pelo rizado surge en torno al respeto de las diferentes texturas, es decir, de los distintos modelos de belleza. Esa es la reivindicación que hay detrás de querer abrazar tu melena rizada y explotar al máximo toda su belleza.
Es importante resaltar nuestra singularidad, ya que no hay dos tipos de rizo iguales. No solo la forma de la onda es diferente, también hay que tener en cuenta otros elementos que los hacen particulares como el grosor, más fino o más grueso, y la hidratación, más graso o más seco. Por eso, este método se basa en la personalización. "El método curly viene a crear un protocolo de cuidado adecuado para las necesidades del pelo rizado, ya sea natural o permanentado, que también son distintas en cada persona. Por eso no podemos establecer unas rutinas estandarizadas para todo el mundo, sobre todo con los productos que se utilizan, aunque sí es cierto que algunas pautas son comunes. A estas personas les une que tienen una melena ondulada o rizada, pero después algunas tendrán el cabello más seco o más graso, más fino o más grueso. Eso provocará que en algunos casos necesiten además hidratar más y en otros crear más volumen. También tienen mucho que ver los términos porosidad y elasticidad, sobre los cuales se realiza un diagnóstico a fin de equilibrar el cabello, aportando hidratación o proteínas.", explica María José Llata de Peluquería Llata Carrera desde Santa Cruz de Bezana (Cantabria).
Es un método que consigue las mejoras de forma progresiva, una vez el pelo se va recuperando de todos aquellos ingredientes deshidratantes presentes en la mayoría de los cosméticos para el cabello, así como de la deshidratación que provocan algunos hábitos.
"Se estima que en unas tres semanas ya se pueden apreciar los primeros resultados, aunque el periodo de transición es de unos dos o tres meses. Para comenzar debemos utilizar productos que no incorporen en su formulación ni siliconas, ni parabenos, ni sulfatos ni alcoholes, ya que son ingredientes que deshidratan. Sin embargo, en el método curly profesional vamos un poco más allá y diferenciamos los que sí son aptos a pesar de ser de estas familias. Debemos recurrir a productos específicos para pelo rizado que contengan ingredientes humectantes o a base de aceites naturales como el de coco, oliva, argán o jojoba o aloe vera. Con este método se evita el lavado frecuente, aunque siempre adaptado a las necesidades de cada persona. No se cepilla en seco, solamente se desenreda en mojado. También matizar que en el método curly profesional no se deja el pelo mojado, ya que no es recomendable. La acción continuada del agua sobre las escamas que forman la fibra capilar las dilata y luego es difícil corregirlo. Por eso hay que secarlo y no dejar el agua demasiado tiempo para que no se abran. En cuanto al corte, se recurre al dry cut o corte en seco que se utilizará en los patrones 3 y 4, los más rizados y afro, con una técnica propia", asegura María José Llata de Peluquería Llata Carrera.
En el método curly se utilizan los productos necesarios para no sobrecargar el pelo con múltiples cosméticos y el uso que se hace de los mismos puede ser diferente. Para aquellas melenas muy deshidratadas se recomienda de vez en cuando recurrir al salón para reforzar la hidratación, así como para que se analice nuestra melena y se le ofrezca lo que necesita.
"Para recuperar la hidratación del cabello, en el salón propongo realizar un tratamiento para ello. También, aconsejo recargar las proteínas para reestructurar los rizos y realizar un peeling que elimine depósitos y suciedad en el cuero cabelludo. Son siempre protocolos personalizados que se llevan a cabo cómo y cuándo cada persona necesite. En casa, al salir de la ducha, aconsejo envolver el pelo en una toalla de microfibra, nunca de algodón, ya que favorece el encrespamiento. Todas estas pautas son para siempre, ya que el método curly no es solo un método de cuidado del rizo, sino que va más allá y se ha convertido en una filosofía de vida", añade M.ª José Llata.
El propósito de este método es alejar cualquier elemento perjudicial para el rizo, todo aquello que lo deshidrate o debilite y que le impida mostrar su belleza natural. "Para prevenir que se encrespe, es muy importante no friccionar el pelo con nada. Por eso es mejor dormir sobre una funda de almohada de seda. El algodón fricciona el pelo y absorbe la grasa natural, en cambio, la seda lo deja casi intacto. Podemos sustituir la funda de la almohada por un pañuelo de este tejido y, especialmente en la cama, una forma particular de recogerlo es en la parte alta de la cabeza para que esté a salvo. El método curly profesional se adapta también al salón y no deja de lado otros servicios como son las coloraciones siempre que se lleve a cabo el método con la correcta aplicación de cada producto y en cada momento. El rizo necesita mimo y cariño", sugiere María José Llata.
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