A lo largo del año, la piel del rostro cambia. Una evolución promovida por emociones, como el estrés y/o el cansancio, la exposición solar sin una correcta protección, el uso de la mascarilla acompañada del fenómeno maskné... que acaban teniendo su efecto en la dermis. Unas consecuencias que las diferentes skincare ya ya no pueden frenar o combatir con la misma eficacia. Para esos casos, desde EL ESTILO te revelamos -con la ayuda de los expertos de Facialderm- como paliar estos signos del envejecimiento cutáneo a través de la fusión de tratamientos de belleza y ejercicios de yoga facial.
En primer lugar, los expertos dictan que el yoga facial ayuda a liberar a la piel del estrés y que se presenta como un complemento idóneo de los diferentes skincare, promoviendo resultados más rápidos y eficaces. Asimismo, puedes potenciar sus efectos con el rodillo de jade o la piedra Gua Sha
Contorno de los ojos
Con estos ejercicios se puede conseguir, por ejemplo, reducir el tamaño de las ojeras y las líneas de expresión del contorno de los ojos. Para ello, tan solo tienes que posicionar el dedo índice sobre la ceja y el pulgar sobre el orbital inferior formando un semicírculo. Después, haz una especie de "V" con dos dedos y coloca uno a cada extremo de la ceja, luego intenta levantarla mientras estos hacen fuerza en el sentido contrario. Lo ideal es realizar ambos ejercicios durante, al menos, diez repeticiones y, asimismo, puedes complementarlo con algún sérum específico -que penetre en las capas más internas promoviendo el efecto- y tu crema habitual para conseguir una dermis lisa.
Frente lisa y sin imperfecciones
Por otro lado, la frente es una de las áreas -junto al contorno de los ojos- más propensas de padecer pequeñas arrugas, como consecuencia de los propios gestos. Para ello, haz una "C" con los pulgares e índices y colócalos alrededor de los ojos. Con los índices encima de las cejas y los pulgares sobre las mejillas, tira hacia arriba para tratar de levantar las cejas con los ojos muy abiertos. Mantén esta posición durante dos segundos, relájate y repite de nuevo tres veces más. A continuación, quédate en esta postura durante diez segundos.
Al igual que ocurría en el anterior ejercicio, puedes potenciar los resultados con un sérum que ayude a minimizar el tamaño de los poros y combatir el exceso de sebo de esta zona. Los expertos recomiendan añadir el Sérum 04 reductor de poros y antiestrés (32,90 euros) de Facialderm y aplicarlo con un suave masaje.
Reduce la papada
En este caso, debes colocarte, como si sujetaras tu cabeza, con una mano y luego empujar la barbilla hacia abajo sobre los dedos que la sostienen. A la vez, apoya el codo sobre la otra mano. Mantén la postura durante tres respiraciones profundas y después utiliza los dedos dando toques suavemente en la parte inferior de la barbilla. Alterna con cada una de tus manos durante unos quince segundos, aproximadamente, para que sea efectivo.
Por último, una vez realizados todos los ejercicios, es importante relajar el rostro dando toques suavemente con las yemas de tus dedos por todo el rostro.
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