Para los amantes de los sombreros llega el Santo Grial de su complemento favorito. Los míticos sombreros Panamá creados por las manos de Simón Espinal y fabricados por Brent Black han creado la joya de la corona tras más de dos décadas buscando el diseño perfecto con los detalles más cuidados.
[¿Por qué se llaman sombreros de Panamá si son de Ecuador?]
Se llama El sombrero, un nombre sencillo para un diseño que cuesta 100.000 dólares, lo que equivale a más de 82.000 euros. Se trata del mejor Montecristi Panamá del mundo y está confeccionado con paja toquilla ecuatoriana que destaca por ser extremadamente fina.
Siempre ha sido una obsesión de Brent: encontrar el sombrero perfecto. "Toqué mi primer sombrero Montecristi en 1988. Sentí la delgadez entre mis dedos, lo pesé en mis palmas, lo levanté hacia el sol para ver los anillos concéntricos en la corona reluciente, lo examiné de cerca admirando la textura del tejido. Hice lo mismo con varias docenas de otros sombreros, uno a la vez, hasta que llegué al final de la pila. Luego le pregunté a Espinal, dócil y respetuosamente: '¿Puedo tomar un poco más, señor? ¿Tiene alguno más fino que esos?' Durante más de veinte años, he estado buscando los mejores sombreros Montecristi. Siempre he preguntado '¿Hay alguno mejor?' ¿Hay alguno más fino? Hice esa pregunta tantas veces durante tantos años que se convirtió en una broma. Todos los comerciantes de Montecristi sabían que yo siempre compraría los mejores sombreros que tuvieran. Supieron sacar lo mejor para Sr. Más Fino -como me apodaron-. No tengo idea de cuántos miles y miles de sombreros Montecristi he examinado personalmente a lo largo de los años. ¿Quizás 30.000?", cuenta en su web oficial.
En este sentido, El Sombrero fue un encargo de Brent Black a Simón Espinal, un artesano que vive en el pueblo de Pile en el cantón Montecristi. El experto tejedor tardó más de cinco meses en crearlo, con mimo y basándose en sus patrones más emblemáticos. Todo ese trabajo queda recogido en su alto precio, pero también en su exquisita calidad.
En la década de 1940, cuando los hombres eran considerados auténticos caballeros y las mujeres eran damas, el sombrero Panamá era el sombrero preferido de los varones en climas sofocantes y para mostrarlos en películas clásicas. "El Panamá clásico es mi favorito personal. Es, para mí, el más elegante, el más clásico de todos. (Me gusta especialmente la 'isla' en forma de lágrima en la parte superior de la corona). Este es el estilo que uso personalmente alrededor del setenta y cinco por ciento del tiempo", explica el fabricante en su página.
El creador del sombrero más demandado del planeta tiene claro que el estilo es un factor muy esencial en las personas y que todos quieren tener el suyo: "A juzgar por la cantidad de pedidos que recibo, y por todos los correos electrónicos felices y llamadas telefónicas de clientes a quienes les gusta lo que ven en el espejo, creo que es seguro decir que a las personas les gusta la apariencia".