El pasado 25 de marzo se celebraba en Sevilla el enlace matrimonial de la influencer Teresa Bacca y, sin restarle importancia a la novia, fueron muchos los looks de invitada perfectos que desfilaron por allí. Uno de los más llamativos fue el de Carla Pereyra (35 años) que asistió con su marido, Diego Simeone (52). Días después ha compartido en redes un posado del gran día, en el que se ha podido ver con todo detalle el estilismo elegido para la ocasión. La valoración es clara: sobresaliente en tendencia.
La modelo argentina se convirtió en una de las mejor vestidas y también demostró que, en ocasiones, saltarse las rígidas normas protocolarias de este tipo de eventos es un acierto total. Eligió un diseño de corte pareo, en un amarillo muy luminoso, y con aberturas, mostrando sutilmente parte de su piel, por delante y por detrás.
El modelo, que se llama Portia Lurex Georgette Midi dress, es de estilo retro, con manga larga terminada en puño, aunque Carla lo llevaba subido como si fuera una manga francesa, top drapeado, cinturón en la misma tela realzando las formas, y falda wrap dejando parte de la pierna a la vista. Lo más atrevido del diseño, un detalle cut out en forma diagonal en la zona del pecho y la espalda sutilemente abierta.
[Tamara Falcó luce la falda rosa plisada de Zara que te convertirá en la invitada más elegante]
Lo firma el diseñador Christos Costarellos, de ascendencia alemana, aunque lanzó su firma de moda en Grecia en 1998. Ha vestido a muchas famosas, entre ellas Carrie Symonds (35), para quien creó un precioso vestido nupcial en su boda con el ex primer ministro británico Boris Johnson (58), en 2021.
Pereyra apostó por un corte que mezclaba la elegancia del tejido de lúrex en tonalidad cúrcuma, con el toque atrevido que la dan las aberturas y el clasicismo del largo tres cuartos y el cuello cerrado. El vestido está a la venta en la web de la firma por 875 euros. Lo combinó con unas sandalias doradas de pulsera con una flor en el empeine y un bolso metalizado rígido de Aquazzura. También llevaba guantes de croché a juego con el vestido. Son de la firma Varade y cuestan 65 euros. La guinda del look era un tocado de la firma preferida de las famosas, Mimoki, muy original: una diadema brillante de la que salía una red nude que tapaba parte del rostro.