Nadie puede negar que el estilo de la conductora de Fiesta es muy personal, ella le pone a sus propuestas de moda su sello personal demostrando que, por encima de modas, tiene muy claros sus gustos. Emma García (50 años) tiene un accesorio preferido que elige en algunas ocasiones para trasformar sus looks y darles un toque bastante cañero. Recurrió a él en su última aparición en el programa de Mediaset y volvió a triunfar.
No es un bolso, ni un cinturón, se trata de arneses de cuero que sabe combinar acertadamente. En esta ocasión ha sido la pieza estrella de un outfit rompedor: lo llevó sobre un vestido bicolor de una de las firmas que más le gusta últimamente: The IQ Collection. El diseño de Inés Domecq, en blanco y marrón, se llama Eliane y cuesta 195 euros.
El patrón es sofisticado y original: el cuerpo entallado de escote halter acaba en una falda asimétrica bajo la cual hay otra pieza blanca de vuelo hasta los pies, aportando movimiento a la prenda. Es de algodón y se cierra a la espalda con cremallera.
La presentadora ha añadido un arnés marrón con varias correas a la cintura, que realza su silueta. Una lección maestra para demostrar que se puede combinar un estilo mininal con otro bondage y salir airosa. La autora de la pieza es Ruth Durendez de Samurai San. Desde su casa taller de Murcia, esta diseñadora crea sus accesorios de piel de manera artesanal y personaliza sus diseños para los clientes.
No es la primera vez que Emma recurre a ella, ha lucido varios arneses en diferentes tonos durante los últimos meses. Tampoco es la única famosa que los ha lucido. Lara Álvarez (37) incluyó varios en sus looks durante una de las ediciones de Supervivientes y en la web de la firma hay una colección entera con su nombre. La cantante Natalia (40) ha incluido uno de los llamativos corsets de Samurai San en el vestuario de su actual gira y en su último videoclip, en el que aparece con uno blanco. Por su parte, Omar Montes (34) se puso uno negro durante su visita a El Hormiguero el pasado mes de marzo.
Estos arneses, además, entran dentro de la corriente slow fashion que busca el respeto por el planeta. "Todos nuestros productos están hechos de manera artesanal con cuero de vacuno de alta calidad, lo que les confiere una durabilidad muy extensa. Nuestros diseños son atemporales y no se rigen por modas, por lo que prevemos un uso muy prolongado de los mismos. Sentimos un gran respeto y amor por los animales, por lo que solo utilizamos pieles provenientes de la industria alimentaria, y en su gran mayoría las compramos de sobrantes de la industria peletera. Jamás compraríamos pieles de animales criados solo para el uso de sus pieles", explica Ruth Durendez.