La Mercedes-Benz Fashion Week Madrid ha llegado a su fin en estos días y lo ha hecho de la mejor forma posible. La guinda del pastel a esta impresionante semana de moda patria la ha puesto el reconocido diseñador Félix Ramiro, que este lunes 19 de febrero presentó Salvaje, una colección en la que ternura, fuerza y elegancia se convierten en un viaje hacia un universo repleto de tendencias. Tejidos, colores y patrones confluyen bajo el sello de la firma, insignia en sastrería española: el de la maestría de un buen saber hacer y la calidad de moda lenta de autor durante más de 35 años.
Salvaje, según definen desde la marca, "es una huida hacia un espacio donde no existe reloj, ni los días, ni las semanas, ni las miradas ajenas. Donde hay espacio para todo tipo de tendencias, colores y patrones". Se trata de una colección que "bebe de la naturaleza, la arquitectura, la creatividad y la innovación como inspiraciones y destinada a un hombre que, a través de su imaginación y su intuición, es capaz de guiarse para configurar un estilo propio".
Patrones audaces, superposiciones impactantes, cortes limpios y pliegues estratégicos crean un equilibrio entre forma y función para dar como resultado una sastrería renovada y contemporánea. A través de más de 50 looks, Salvaje plantea "una propuesta que evoluciona en colores, materiales y tejidos".
Yulen Pereira desfilando para Félix Ramiro.
Félix Ramiro siempre se ha caracterizado, además de por crear prendas increíbles para el vestidor del hombre, por ser acompañado en sus desfiles por grandes nombres de personalidades conocidas de la comunicación, la moda y el entretenimiento.
En esta ocasión, apoyándolo dentro y fuera de la pasarela, estuvieron el esgrimista Yulen Pereira, el modelo Pablo Marques, la presentadora Isabel Gemio y la supertop internacional Valeria Mazza junto a dos de sus hijos, Balthazar y Benicio Gravier, que desfilaron junto al resto de modelos.
Balthazar Gravier, hijo de Valeria Mazza, desfilando para Félix Ramiro.
Guía técnica de la colección Salvaje: lana, alpaca, mohair, algodones, panas, terciopelos, ramie liso, doppio satén liso, polipiel, metales y oros conforman algunos de los tejidos de una colección en la que estampados convergen sin miedo al más es más. Lo hacen en una paleta cromática que emula la inspiración salvaje que da nombre a la colección.
De tonalidades cálidas como el fucsia, el rojo o el granate a otras intensas como el amarillo Nápoles o el azul cerúleo, con espacio para colores que evocan la naturaleza como tostados y arenas, además de tonalidades neutras como el negro o el gris, fundamentales en el universo de la sastrería.
Sobre Félix Ramiro
Benicio Gravier, hijo de Valeria Mazza, desfilando para Félix Ramiro este pasado lunes en Madrid.
Con más de 35 años de experiencia en el sector y un saber hacer generacional, Félix Ramiro es un diseñador insignia en la sastrería española, convertido en diseñador de cabecera de rostros conocidos e internacionales de la talla de David Bisbal, Miguel Torres, Gerard Romero, Antonio José o Miguel Poveda, pero también de familias que confían en las creaciones de la firma para los momentos más importantes de sus vidas a nivel generacional.
"Lo importante de un traje es lo que no se ve; la arquitectura que hace que sea capaz de resaltar el cuerpo de quien lo lleva y suavizar sus defectos", afirma el diseñador Félix Ramiro.
Inspirado por el amor al oficio desde sus orígenes en el taller de su tío Dionisio, la pasión por la sastrería de Félix Ramiro le ha llevado a hacerse con premios nacionales que galardonan su trayectoria y saber hacer, además de convertirse en un epicentro de la sastrería en España desde los años ochenta, con puntos de venta físicos en el país y también internacionales, apostando por esta expansión.