Si practicar deporte no es algo que ya nos cuesta por sí solo –mentalizarse, ponerse en marcha, salir a correr-; en verano, además, hay que informarse de la climatología y ver si es (o no) el momento ideal. Que seguramente sea ese en el que a ti no te apetezca. Pero si lo dicen los expertos, habrá que hacerles caso.
Antes de practicar deporte, hay que tener en cuenta condiciones climatológicas e informarse del índice ultravioleta (UV). Al menos, para Eduardo González Zorzano (experto del departamento médico de Cinfa) esto es lo básico. Si además, eres de las que salen a correr, deberás acordarte de que por cada 300 metros de altitud, el poder eritemático de la radiación ultravioleta del sol (ese que produce las quemaduras) aumenta un 4%. En Madrid, por ejemplo, que está a unos 600 metros por encima del nivel del mar el porcentaje se duplicaría. Así, cuanta más altura tiene tu recorrido, mayor será el riesgo de quemaduras.
Además, por si no fuese suficiente, hay que tener en cuenta otros elementos, (créenos, parece difícil, pero merece la pena calzarse las zapatillas): la arena y el agua reflejan las radiaciones un 25%, mientras que la hierba lo hace en un 10%; por lo que ellos también suman sus efectos directamente sobre la piel. Y al igual que el sol, las nubes permiten el paso de los rayos ultravioletas y el viento –al conseguir que no percibamos el calor- hace que nos relajemos, pudiendo jugar en nuestra contra.
Entonces, ¿cuándo podemos salir a practicar deporte? Siempre que quieras. Lo único que, sobre todo en verano, deberás extremar tus precauciones.
CÓMO NOS PROTEGEMOS
Lo ideal es, como es lógico, aplicarse un producto fotoprotector por toda la piel entre 20 y 30 minutos de la exposición solar; aunque sea para salir a practicar deporte y no tumbarse en la arena. Además, como asegura, González: “usar gorras con visera o gafas de sol homologadas se convierten en el complemento necesario de una ropa deportiva cuyo tejido debe ayudarnos a protegernos de las radiaciones ultravioletas del sol”.
En verano es muy importante eludir la práctica deportiva entre las 12 y las 16 horas, “no solo por el riesgo de quemaduras”, advierte González, “sino por la posibilidad de sufrir una deshidratación o un golpe de calor”. Por eso, es fundamental hidratarse convenientemente durante todo el ejercicio, no solo al final. Son los mismos consejos que nos daría un experto si le preguntamos sobre cuándo es mejor ir a tomar el sol a la playa. Una opción puede ser salir a primera hora de la mañana o a última hora del día, como te aconsejábamos en este artículo en el que viene demostrándose como puede ser, incluso, más beneficioso.
QUÉ FÓRMULA ES LA MÁS ADECUADA
Actualmente, están apareciendo fórmulas que, además de proteger de los rayos del sol, son resistentes al agua y al sudor. Según la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA), que se encarga de ofrecer datos científicos para saber qué comer o cómo consumir medicamentos para que sean siempre beneficiosos para la salud, un fotoprotector resistente al agua es aquel que permite dos exposiciones continuadas (sin renovación del producto) de, al menos, 20 minutos.
Así, habría que distinguir entre los productos resistentes al agua (water resistant), cuando no ha perdido su capacidad protectora después de 40 minutos de inmersión; y los que soy muy resistentes al agua (very wáter resistant), cuando alcanzan los 80 minutos. Por ello, si vas a salir a practicar deporte, estas son tus mejores opciones. Sin olvidar que, si te secas con una toalla, estarás retirando el sudor y sí, tu fotoprotector. Algunas de las fórmulas más novedosas aparecen en la siguiente galería. No lo dudes y hazte con una de ellas, tu piel lo agradecerá y se convertirá en una cosa menos de la que preocuparte.