La fuente de información gratuita que ofrecía el perfil de Instagram de la ex de Feliciano López (34) ha cerrado sus puertas a los ojos más cotillas. Alba Carrillo (29) parece ser consciente de la cantidad de noticias que genera cada publicación suya en la red y ha preferido dar carpetazo al asunto y resarcirse en la intimidad o en la televisión donde cobra por ello y puede intentar mejorar los datos de audiencia de su programa.
Quizá la constante lupa periodística que acechaba en todas sus imágenes y textos en Instagram ha conseguido acabar hartando a la modelo que prefiere mantener cercado en su núcleo más cercano sus opiniones. Cada palabra de Carrillo plasmada en la red ha sido meticulosamente estudiada para descubrir las posibles pullas dirigidas a su ex marido tenista. Además, la falta de límites que existen en la red social hace que cualquiera pueda dejar un comentario ofensivo hacia ella o hacia su familia, y ya que su entorno está en el punto de mira tras la supuesta respuesta de su madre a una foto de Feli, Alba habrá optado por cortar por lo sano y privarnos a todos de sus pensamientos, ilusiones y demás aventuras diarias.
La modelo ha decidido poner su cuenta en privado.
La última fotografía que colgó con su cuenta aún en abierto fue la del almuerzo este fin de semana junto a su hijo Lucas y su ex Fonsi Nieto (37). Una vez más los medios se hicieron eco de la imagen subida por la modelo y fue contenido de noticia en todos los portales de prensa rosa. Y es que cuando la propia foto no es relevante, lo es el mensaje que le acompaña y cuando no es ninguno de los dos, la lupa está encima de un posible "zasca" a su ex pareja. La marca Alba Carrillo está en pleno auge y aunque es comprensible su deseo de intimidad, tarde o temprano, cuando pase la tormenta de Feliciano, volverá a exhibir libremente su cuenta de Instagram porque lo verá recompensado con temas para exclusivas y para sacar tajada de todo cuanto se hable de ella en los medios de comunicación.
Esta fue una de las últimas fotos que subió con su perfil aún público.
La cuestión es que haga lo que haga Carrillo será chascarrillo. Con su red social en abierto el escándalo estaba en sus publicaciones, y ahora, que lo ha puesto en privado, el tema de discusión está en el porqué y en cómo nos surtiremos de sus nuevas andanzas. La decisión de Alba puede estar basada en una estrategia de cara a asegurarse mayor éxito en el programa de Hable con ellas porque puede ser la única vía por el que el resto de mortales podamos conocer el estado de ánimo de la modelo y los posibles mensajes ocultos que mande al hombre que compartió con ella 11 meses de matrimonio. Estaremos atentos a próximos capítulos.