Aramis Fuster, la bruja a quien cegó la fama

La conocida vidente televisiva Aramis Fuster (62 años) era ingresada el pasado martes en la unidad psiquiátrica del Hospital La Paz, en Madrid, después de ser hallada en una habitación del hotel de la capital. Un nuevo y oscuro episodio que añadir a su ya de por sí cuestionable currículum de protagonista de sucesos. Y es que, durante los últimos tiempos, resulta difícil atisbar credibilidad en todo lo que rodea a la vida y obra de la bruja.

Lamentablemente Fuster ha conseguido convertirse durante los últimos años en el Pedro de la fábula del lobo. Tras cualquier noticia protagonizada por la bruja siempre aparece cierto tufo de montaje. De hecho no es la primera vez que intenta llamar la atención de los medios con un intento de suicidio. Todo por la fama.

Hace ya algunos años, una de las brujas más conocidas de la pequeña pantalla era noticia después de que un reportero de Aquí hay tomate, preocupado por su estado de salud, acudiera hasta su domicilio. Allí, la vidente le confesó que había ingerido más de 70 pastillas y se había administrado varias inyecciones de insulina con el objetivo de acabar con su vida. El reportero, alarmado, decidió llamar a la policía y los servicios médicos.

Esta no era, sin embargo, la primera vez que Fuster intentaba seguir en el candelero a toda costa. Años antes incluso llegó a acusar a un exmarido de maltratador o inventarse una relación con el mítico comentarista de Eurovisión, José Luis Uribarri. Míticos son también sus desmayos fingidos.

De hecho la última noticia que tuvimos de ella era que estaba ofreciendo sus servicios como “dómina”, pero no como prostituta de lujo. Tras ser desahuciada en junio de 2015 debido al impago de 15 meses del alquiler de un piso en Berga (Barcelona) y tras acumular varias deudas, el icono del tarot durante los años 90 no ha encontró otra solución que la de ofrecer sus servicios sexuales.

Así se podía comprobar en la web de escorts de Anna Solano, donde María Antonia Pérez Sánchez, que así se llama realmente la conocida vidente, ofrecía sus servicios como dominatrix. En su perfil podían verse fotos suyas desnuda, así como ataviada con un traje de cuero de dominadora.

Sin embargo aquello no fue más que un nuevo intento de Fuster por intentar volver a salir en televisión. Según Solano, Fuster nunca realizó ningún servicio de este tipo con aquellos clientes que lo solicitaron y desde hace ya algunos meses sus fotos han sido retiradas de la web.

Aramis Fuster.

¿Cuál es tu currículum de bruja?

Conocida por participar en programas como Crónicas Marcianas, Hotel Glam o Moros y Cristianas, en la carrera televisiva de esta bruja de 692 años existe un antes y un después de su participación en Sálvame Golfo, el precedente de Sálvame Deluxe, en una noche de julio de 2009.

Fuster regaló a todos aquellos consumidores de este tipo de entrevistas freak uno de los vídeos más surrealistas que se recuerdan de los últimos años. Sin embargo, la bruja también cavó su propia tumba de cara a futuras participaciones en la pequeña pantalla por atreverse a atacar de malas maneras a Kiko Hernández (40) y Belén Esteban (42).

Aramis entró en plató como un elefante en una cacharrería. Quería dar espectáculo, ser la protagonista. “¡Aquí la protagonista soy yo!”, repetía una y otra vez. Sin embargo, se pasó de frenada. Sin ningún tipo de medida, la bruja llegó a levantarle la mano a Esteban, insultar a Jorge Javier Vázquez (46) o Rosa Benito y hasta cuestionar la enfermedad de Hernández cuando éste le acusó de vivir de montajes.

“¡Tienes la muerte en la cara!”; llegó a decirle a Hernández después de haberle acusado de inventarse un cáncer. “¡Eres una hija de puta!”, le contestó el colaborador. Tras aquello, el plató de Sálvame se convirtió en un auténtico polvorín. “¿Cuál es tu currículum de colaboradora?”, le espetó a Belén. “El cariño de toda esta gente. Cosa que tú no tienes”, le contestó la de San Blas.

Sin saberlo, la bruja estaba consumiendo su última gran entrevista en prime time. Tras aquello, la vidente nunca volvería a sentarse en un silla para ser entrevistada en horario de máxima audiencia. No se podía correr el riesgo. Hace unos meses, Fuster intentó participar en Gran Hermano VIP. Sin embargo, la organización no se atrevió a encerrar en una casa a alguien así.