El 30 de agosto se producirá el debate de investidura de Mariano Rajoy (61 años). Para relajarse y coger fuerzas, Pedro Sánchez (44) ha disfrutado de un fin de semana en Ibiza. De esta manera el líder socialista regresa por segunda vez durante este verano a la isla pitiusa. Ya estuvo allí el pasado 9 de julio, donde pasó también unos días de relax en el Hotel Rural Cas Plá, donde ha vuelto a alojarse una vez más. La amistad que tiene con el propietario y, la tranquilidad y privacidad que le ofrece, han sido determinantes para elegir este alojamiento, en una zona montañosa del norte de la isla, como refugio de miradas indiscretas. El hotel tiene dieciséis habitaciones, entre ellas las suites con vistas al mar con un precio de 301,40 euros por noche.
Mientras el viernes Sánchez ofrecía una rueda de prensa, donde volvía a repetir públicamente el "no" a la investidura de Rajoy, ajeno a las presiones de la oposición y de su propio partido. El sábado se lo tomó libre y disfrutó con su familia y unos amigos de un tranquilo paseo por el pueblo del Puerto de San Miguel. Tras entrar en un supermercado donde hicieron la compra y sacar dinero en un cajero, como cualquier turista, pusieron rumbo al Parque Natural de Les Salines donde disfrutaron de un divertido día de playa. Allí eligieron una zona discreta para disfrutar de un chapuzón, en una de las playas más bonitas de la isla. Sánchez lucía un bañador azul, con el que mostraba que se encuentra en plena forma. En esta ocasión sin gafas ni extrañas y originales gorras en las que camuflarse para pasar desapercibido. Su mujer, Begoña Gómez, eligió un bikini en blanco y negro y, como su marido, luce una figura envidiable.
La pareja protagonizó una romántica escena al salir del agua cogidos de la mano, mientras sus dos hijas, Ainhoa, de diez años, y Carlota, de ocho años, ambas con bikinis rosas, les seguían por detrás. El Secretario General del PSOE llegaba a Ibiza el pasado jueves 18 de agosto, alrededor de las seis de la tarde, en un vuelo de la compañía low cost Ryanair proveniente de Madrid. Sus escapadas durante estos dos meses han sido motivo de burla por parte de algunos que han visto en las múltiples mini vacaciones de Sánchez un desinterés por parte del líder socialista de lograr un gobierno para España.