El 10 de octubre de 2008 es una fecha que estará marcada para siempre en la mente de Esther Arroyo (48 años). Aquel día marcó un antes y un después en su vida. Es mañana sufría una accidente que se saldaría con la muerte de uno de sus mejores amigos y que le dejaría unas secuelas físicas que le han perseguido desde entonces.
De hecho, la que fuera Miss España en el año 1990, llegó a confesar hace unos años que tras el siniestro era evidente que se había roto su profesión y que no volvería a trabajar como antes. Sin embargo, la modelo ha vuelto a encontrar trabajo en televisión, aunque sea a modo de colaboración.
Será en el programa Amigas y conocidas, donde se convertirá en una de las colaboradoras habituales del espacio presentado por Inés Ballester (57) después de que a primeros de agosto acudiera para ser entrevistada. Así lo ha anunciado la presentadora al despedir el programa de hoy. "Empezamos la nueva temporada. Bienvenida Esther", comentaba.
Asimismo, otra de las colaboradoras, Sonia Ferrer (38), publicaba una fotografía en su cuenta de Twitter junto a Arroyo. "A las amigas que vuelven de vacaciones las recibimos con los brazos abiertos y mucha envidia", escribía.
Como una delincuente
Una buena noticia para Arroyo, que durante los últimos meses está por fin volviendo a sonreír. "Estoy viviendo el mejor momento de estos años pasados. Ha sido una recuperación muy larga, tanto física como psíquica y aquí estoy dispuesta a volver al ruedo", confesaba entonces.
"Yo he tenido muy buena suerte porque he tenido unos médicos que consiguieron salvarme la pierna. Pero luego en la parte judicial ha sido un desastre. Hasta el punto de que me han hecho sentir como una delincuente", comentaba.
El pasado enero, el Juzgado de lo Penal número 2 de Cádiz fijó la indemnización de Esther Arroyo en 463.726,65 euros: 197.804,90 por las lesiones y secuelas, 257.237,62 por lucro cesante (es decir, por la disminución de ingresos de la víctima) y 8.684,13 por gastos.
Sin embargo, un mes después,la Audiencia Provincial de Cádiz rebajó esta cantidad en 133.523 euros hasta 330.203,65 euros después de que la compañía aseguradora interpusiera recurso contra la sentencia. La modelo había solicitado una indemnización de cinco millones de euros.
El accidente
Arroyo resultó gravemente herida en 2008 en la carretera N-340, cerca de Vejer de la Frontera (Cádiz), cuando el conductor de una furgoneta perdió el control y colisionó con el coche en el que viajaba ella, la cantante Ana Torroja (56), sus respectivas parejas y un amigo de todos ellos que falleció a consecuencia del impacto.
La primera sentencia le condenó por una falta de imprudencia leve con resultado de muerte y por cinco faltas de imprudencia con resultado de lesiones a una pena de multa de 380 euros, así como a la privación del carné de conducir durante un año, y cifró distintas indemnizaciones para todos los heridos.