10 de noviembre. Noche cerrada. El Teatro Real de Aranjuez se prepara para uno de los acontecimientos más importantes de la temporada. I.P., más conocida como Isabel Pantoja (60 años), presenta su nuevo disco, Hasta que se apague el sol. Que se ha puesto intensa la mujer después de su paso por la cárcel. Las Pantojers (así llamo yo a las fans de La Panto) esperan ansiosas la llegada de Kiko (32), Chabelita (21) y Anabel (30). Sin embargo, algo llama su atención. ¿Qué o quién puede haber hecho que una Pantojer que se precie centre su atención en algo o alguien que no tenga que ver con el clan de la tonadillera?
Ni más ni menos que José Luis Moreno (69) disfrazado de José Luis Moreno tras una visita a un buffet libre (o varios). La virgen, Pepe, ¡cómo te has puesto! Y no lo digo yo, lo dice la cara de estas dos Pantojers.
Vale, analicemos la imagen. Joselu aprieta la boca en un claro signo de "vaya, me han pillado". Parece que lo de "dientes, dientes, que es lo que les jode", no va con él. La señora de las gafas (que solo se las pone cuando va de concierto) señala con dedo acusador al empresario con cara de "mira Mari, si ya te he dicho yo que es el Moreno". La Mari (que si no se llama así, pido desde aquí que marque el teléfono de aludidos y lo desmienta) abre la boca, sorprendida a la par que aturdida, mientras piensa "con lo que era este hombre y lo guapo y apañao que salía en la tele"). Finalmente, la joven de la derecha no se entera de la misa la mitad porque, por su apariencia, le interesa bastante más Justin Bieber (22).
Pero volvamos a lo que realmente importa. ¿Qué te ha pasado, Joselu? ¿Has contratado a Paquirrín como personal trainer o qué? Vale que el verano es muy duro para todos, pero con el pedazo de gimnasio del que presumiste delante de Bertín Osborne (61) en Mi casa es la tuya, ya te podías haber recuperado… Aunque ya decía yo que estaba muy limpio y los aparatos parecían casi nuevos. Más o menos como la bicicleta estática que se compró mi madre hace 20 años y ahora es un perchero.
A lo mejor era de atrezo y lo hizo construir solo para lucirlo en el programa. Que la gente con tanto dinero es muy excéntrica… Otra de las conclusiones a las que he llegado viendo el nuevo físico de Joselu es que la comida de rico engorda lo mismo que el McDonald’s. Por mucho que cenes caviar, si te metes entre pecho y espalda tres kilos, se nota. Y eso es así.
Sin embargo, el presentador sigue teniendo tirón entre sus fans. Cuando intentaba acceder al Teatro Real de Aranjuez, las féminas consumidas por las feromonas que desprende Joselu se tiraban a sus manos. Un simple roce les bastaba para ser felices. Él, como si fuera George Clooney (55), calmó su efervescencia amorosa y las dejó satisfechas. Si es que está hecho un gigoló.
¿Qué pensarán Monchito, Macario y Rockefeller de la transformación de su amo y señor? Pues no lo sabemos. Pero tampoco tenemos muy claro que no hayan servido de postre del señor Moreno. Esperemos que sigan vivitos y coleando. Y no me resisto a terminar este artículo sin compartir con vosotros este parecido razonable que me ha venido a la cabeza cuando he visto la nueva imagen de Joselu. Decidme que no se parecen.
P.D: Ya sé que este patinazo está dedicado a José Luis Moreno, pero no me gustaría que os perdieseis el otro cuadro de la noche. El modelito que lució la Panto sobre el escenario. Ojito con el cinturón-crucifijo-rosario. Muy fuerte todo.