De los planes que haga Ramón García (55) en Nochevieja depende el bienestar de muchos. Y es que, si el presentador se queda en casa será malo para el resto de España. Esta semana, García se convertía en trending topic cuando salía a la luz que TVE no le había llamado para presentar las Campanadas. Era un drama nacional.

El presentador dejó de presentar las Campanadas en Antena 3 en 2009 y regresaba a cumplir el sueño de los españoles en 2014. El presentador ha repetido junto a la ya segura Anne Igartiburu. Sin embargo, este año todavía no ha recibido noticias por parte de la televisión pública para tomarse las uvas delante de los espectadores.

Casualmente pasa en el momento en que TVE cumple 60 años de historia. Él asegura que se sorprendería si no contasen con él en esta fecha tan especial y ahora que están preparando una gala especial para recordar sus grandes éxitos. En EL ESPAÑOL hemos hablado con el presentador, ahora trabajando en Castilla-La Manda TV.

Pregunta. ¿Echa de menos trabajar a nivel nacional?

Respuesta. No. Para nada. Te aclaro un poco como ha sido todo esto. Me hacen una entrevista para hablar de mi programa en Castilla La Mancha, hacemos un recuerdo de programas míticos y lógicamente por la fecha me preguntan por las Campanadas y yo respondo textualmente que a fecha de hoy no se han puesto en contacto conmigo. Sospecho que igual eligen a otra persona que esté haciendo un programa en la cadena. Luego completé diciendo que en TVE me tienen siempre a su disposición. Pero esa pregunta hay que hacerla a la dirección de TVE. Está en su derecho de llamarme o no.

¿Le han llamado a día de hoy?

Hoy es 11 de noviembre. De momento no me ha llamado nadie. No tiene más importancia. Esto es así. Otro año me lo dijeron un 18 de noviembre, otro por contrato. Hay gente que me dice que como estoy en Castilla La Mancha no me llaman. Ahora no existe eso de la competencia. Juan y Medio ha estado en Canal Sur y TVE.

Si ves la programación de TVE, salgo más ahora que antes

No sé si tiene Twitter, pero se ha llegado a decir que era un drama nacional.

Sé que ha sido una locura, que había sido TT. Yo me lo tomo con gracia y con mucho cariño. Me río porque tampoco es para tanto. Son tradiciones. Y cuando una tradición en un medio tan popular como la televisión, la gente quiere ver eso. Y cuando llega su fecha y aquello que les da seguridad, si de repente les cambia, no gusta. Tampoco gusta a veces cuando un presentador cambia de cadena. Agradecidísimo a los comentarios. Después de tanto años es un honor.

¿Estará en la gala del 60 aniversario de TVE?

Tampoco lo sé. A fecha de hoy tampoco me han llamado. Lo cual me llama la atención después de 25 años trabajando allí.

¿Le molestaría que no le llamarán?

Me sorprendería porque si ves la programación de TVE, hay un programa que se llama Viaje al centro de la tele en el que salgo continuamente. Salgo más ahora que cuando estaba a diario.

¿Cree que ha desaparecido esa televisión familiar de la que usted formaba parte?

Hay pocos formatos que se puedan ver en familia. Tienes Tu cara me suena, que es un formato extraordinario; La Voz… Hay cosas, pero no tantas como antes.

¿Qué siente cuando lee titulares contra TVE?

Me duele porque es mi casa. Este año se celebra el 60 aniversario de TVE y es la televisión de todos. La culpa no la tiene TVE. Pasan cargos directivos, van y viene. El problema es la política. Tendríamos que cuidarla, mimarla. Lo que pasa es que nadie le ha puesto el cascabel al gato. No se ha buscado cómo tiene que ser TVE. ¿Cuál es el proyecto de televisión pública que hay en otros países? Eso falta aquí.

Que esté más distante al poder del gobierno…

Eso es complicado, pero es lo ideal. En una televisión pública deberían caber todas las opiniones que caben en el Parlamento español. Es una asignatura pendiente. Han pasado gobiernos de derechas y de izquierdas y nadie lo ha hecho. Es bueno tener una televisión pública potente en todos los segmentos, no sólo en los informativos. Tengo el buen recuerdo de mi época en la que informativos lideraba, también en programas. Y hoy en día no es así. Cuesta encontrar una franja que sea puntero en TVE.

Ha dejado de ser referencia…

Ahí está el último CIS en el que TVE ha dejado de ser referente informativo. Y eso es muy triste. Es señal de que algo no se ha hecho bien. Y ahí están los mejores profesionales. De TVE han salido todos los profesionales de las privadas. Es una pena que se haya perdido esa cantera.

¿Qué le falta por hacer en la vida?

Todo. Yo soy un aprendiz de esto. Cuando veo los programas que he hecho, me da vértigo. Lo bonito es que siempre haya un proyecto nuevo. Ahora estoy disfrutando muchísimo en Castilla La Mancha. Cada día estoy tres días en directo frente a una cámara y al final la televisión es televisión. No hay televisión grande o pequeño. El trabajo siempre tiene que estar bien hecho. La responsabilidad es la misma.

¿Cree que se ha reconocido lo suficiente su trabajo?

No tengo esa necesidad. Se que soy una persona querida y reconocida en la profesión. Por ejemplo tú no estarías hablando conmigo. Lo importante es estar a gusto con uno mismo y saber que lo que has hecho está hecho con honradez. Me voy feliz a la cama todos los días. El reconocimiento es seguir trabajando después de tantos años.

¿Uno llega a pensar en retirarse?

Creo que tengo la intuición para decir: hasta aquí hemos llegado. Eso lo marcan más los espectadores. No hace falta ser mayor o más joven. En EEUU cuanta más edad tienen, más queridos son, tienen más notoriedad y credibilidad. Aquí en nuestro país parece que se quiere jubilar a la gente. Y es un error. El público quiere a los veteranos. En la radio los últimos monstruos de la radio se han ido muy mayores. Cuántos más años, más credibilidad y más respaldo de los oyentes tenían. En televisión yo creo que eso son los directivos que quieren dejar su sello, quieren quitar y poner algo nuevo. Es un poco la crítica constructiva que haga de la televisión actual.

¿Qué tal en lo personal, con Patricia?

Todo estupendo. Tengo unas niñas estupendas, con una vida familiar. Los fines de semana, libres. Lo importante es la salud y la familia.