Su suave entrevista a Isabel Pantoja le granjeó una infinidad de críticas. Era la primera entrevista de la tonadillera en un medio tras su paso por la cárcel y fueron muchos los que echaron de menos muchas preguntas. Aún así, él no se ha inmutado. Es el Jorge Javier Vázquez de Antena 3 y hace lo que quiere en El Hormiguero. Digamos que tiene carta libre (al fin y al cabo es su programa). Se lo ha ganado. No hay estrella de cualquier parte del mundo que no pase por su programa cuando llega a nuestro país. Ahora toca saber si es cierto que tras un gran hombre...
Quienes piensen que Pablo Motos (51 años) coquetea con sus invitadas y puede despertar los celos de su pareja se equivocan. Sepan ustedes que es ella quien decide lo que su marido debe decir y hacer en cada programa. Laura Llopis, la mujer de Pablo Motos, es jefa de guión de El Hormiguero, es el otro cerebro del programa, la artífice del éxito que abruma a su marido. Juntos forman una pareja que vive con pasión tanto el trabajo como la vida privada.
"Es la prueba de que se pueden mezclar afectos y trabajo. Aunque es difícil convivir conmigo porque siempre estoy bullendo ideas y sé que sufre por mí", dijo el presentador en la revista TP. Y el resultado es un triunfo que no siempre se digiere con facilidad.
La semana pasada Motos fue d elas personas más buscadas por los medios de comunicación. "Si Pablo atendiera todas las llamadas no habría Hormiguero. Pero no sólo por Pantoja, eh, el otro día por Mercedes Milá, el otro por Mónica Carrillo, el otro por Laura Pausini... Cada semana es una locura". Habla María Casas, directora de Comunicación de 7yacción, la productora de Pablo Motos.
Sea como sea, Motos se está convirtiendo, a veces a su pesar, en el Jorge Javier Vázquez de Antena 3. "A él no le gusta nada todo esto, vive entregado al programa y no le interesan las polémicas que suscita", señala María Casas. Polémicas que hacen que El Hormiguero sea líder de audiencia semana sí, semana también. El lunes, día de la entrevista de Pantoja, obtuvieron un 23,8% de share, una cifra nada desdeñable.
Laura y Pablo se conocieron en la radio
Y mientras el espacio gana enteros en el ranking, Motos sigue siendo casi un desconocido para la audiencia. Pocas son las entrevistas que se le conocen, y pocas son las ocasiones en las que habla de sí mismo. Lo hizo una vez en su propio programa cuando entrevistaba a Mariló Montero, que como buena profesional, logró girar la tortilla y sacarle información a su entrevistador. "Mi mujer es mucho mejor que yo en todo", decía entonces Motos.
"Nos conocimos en la radio, en Valencia, yo estaba de presentador y ella en producción. A mí me gustaba pero ella pasaba, el desprecio más grande se queda en nada comparado con el de ella. Yo me preguntaba '¿te vas a morir sin haberla besado?', y un día me lancé".
La mujer de la que habla Motos es Laura Llopis, jefa de guión en El Hormiguero, "una profesional excepcional", señalan desde su productora. Motos no sólo trabaja con su esposa, sino que lo hace con sus hijastras (una en guión y la otra en atrezzo), nacidas de una relación de Laura con otra pareja. Ambas forman parte del equipo del programa del que todas las semanas hay que hablar.
El sábado, el único día que desconectan
La pareja se lanza flores el uno al otro. Mientras Motos dice que su mujer es la mejor, ella afirma que sin él sus guiones no sirven. "El guión no vale hasta que Pablo lo hace suyo. Debe conquistar al entrevistado", dijo en el citado reportaje de la revista TP, "no conozco a nadie tan riguroso como él".
"Es una obsesión", contrarresta Motos. Es como vive su trabajo, tan entregado que no tiene tiempo para otra cosa. Le gusta decir que cuando se retire se dedicará a estudiar Neurología, una de sus pasiones (le encanta la ciencia). Y mientras no se retira, aprovecha las vacaciones para sacudirse la adrenalina a base de deportes de riesgo.
Así es más fácil llevar una vida de pareja. Porque ambos tienen unos horarios locos que no dejan espacio para casi nada. "Los sábados no me molestéis que es el único día de la semana que tengo para estar con Laura", suele decir Motos a sus compañeros. Y es cierto: el programa se prepara de domingo a jueves (se emite de lunes a jueves) y los viernes, aunque no hay que ir a plató, Motos se dedica a controlar otros productos de su empresa. Además de Likes, programa diario del que está bastante desvinculado, 7yacción cuenta con Hipnosis y Clandestinos, dos espacios que están a punto de estrenarse. "Él está más entregado a El Hormiguero, pero tiene que estar pendiente de los demás, y eso lo suele hacer los viernes".
El horario de Motos es bastante flexible. Acostumbra a entrar a las 12 del mediodía y termina pasada la medianoche. Suele charlar con sus invitados, controlar algunos asuntos. "Se le hace fácil la 1 de la madrugada", cuentan desde 7yacción. Su mujer entra algo antes, a las 11, y sale también algo antes.
Casoplón en Madrid
Con ese horario es difícil que puedan disfrutar del pisazo que se compraron hace poco más de un año en el barrio de Salamanca. Con la crisis del ladrillo todavía coleando, la pareja pagó 1,5 millones de euros por un apartamento de 300 metros cuadrados, más las reformas y todos los muebles.
Vecino de Felipe González y Luis Bárcenas en la Milla de Oro de la capital, Motos se puede permitir el lujo porque es uno de los presentadores mejor pagados de la televisión. Su caché, que ronda los 4 millones de euros al año, es similar al de la reina de las mañanas, Ana Rosa Quintana.
El trabajo y el éxito profesional a veces no casan con el lujo de llevar una vida tranquila, casera, caprichosa. Y eso es lo que le sucede a Motos, tal y como él mismo admitió en una de las pocas entrevistas que ha dado en los últimos tiempos. Fue con Bertín Osborne, donde se abrió en canal: "Mi programa está muy por encima de mi sueño más salvaje, pero también me quita mucho, me quita mi vida normal. Es verdad que vienen a verme los mejores del mundo, pero luego no puedo hacer muchas cosas que hacía".
Apareció en el programa de Osborne en octubre de 2015 y habló de las hijas de Llopis, a quienes considera sus hijas. "Una es guionista y la otra atrezzo, son guapísimas", dijo el showman, "son dos chicas con talento y sobre todo son muy buenas personas". La familia unida, dicen, jamás será vencida. Y eso Motos lo tiene claro: "Nosotros nunca discutimos en verano, pero en invierno hay fuego, ella tiene una personalidad muy fuerte y yo también [...] y hay enfrentamientos...". Una fogosidad que les ha llevado al éxito.