Bertín Osbone se ponía nostálgico este miércoles. El programa que tenía preparado anoche en Telecinco no era carne para gente joven. Y es que el conductor de Mi casa es la tuya era el invitado de honor en la casa de Michel, el que fuera uno de los grandes nombres del Real Madrid. Su intención: juntar a la histórica Quinta del Buitre.
Sin embargo, aquello no sucedió ya que a la fiesta no asistía Miguel Pardeza. Él era el único de la Quinta del Buitre que no se dejaba caer por el programa. ¿La razón? Ni ellos la quisieron contar. La figura del futbolista onubense pasó por el programa de cuclillas. Si bien fue el jugador con menos progresión de la quinta, lo cierto es que tuvo un papel fundamental en el Madrid.
Según la productora del programa, su ausencia se debe a que eligieron sólo a los cuatro nombres principales de la Quinta por ser los que marcaron a una generación. "Los que jugaron aquella época son estos cuatro que aparecen", aseguran.
Fue el periodista Julio César Iglesias el primero en usar el apodo de La Quinta del Buitre. Tal y como explicó en el programa, el nombre vino de un intento de hacer una referencia a la quinta marcha de los coches y a que estos jugadores nacieron en años muy parecidos, incluido el desaparecido Pardeza. Fue el propio Di Stefano el que decidió subir a cuatro de estos futbolistas al primer equipo. Por sorpresa, Michel fue el último en llegar a la primera categoría.
Han sido muchos los usuarios de redes sociales los que este miércoles por la noche se preguntaban dónde estaba Pardeza. El programa hizo muy pocas referencias al que fuera director deportivo del Real Madrid hasta 2014, a pesar de que reconocían en el vídeo previo a la emisión del programa que Pardeza formaba parte de esta singular pandilla.
Michel y Butragueño, los protagonistas
La ausencia de Pardeza contrarrestó con el protagonismo que se le dio, obviamente a Butragueño, y a Michel, en cuya casa se grabó la entrevista. Madrileño de pura cepa, la familia del entrenador del Málaga no era blanca como todo el mundo esperaba. El jugador confesó que su padre y su abuelo estaban empeñados en que el recién llegado a la familia fuese del Atlético de Madrid. Pero la vida les tenía esperadas demasiadas sorpresas como para que el camino fuese tan fácil.
Nacido en el 63, es el mayor de la Quinta. "Estaba obsesionado con jugar al fútbol y me escapaba del colegio para jugar", dijo Miguel en el programa. Por aquel entonces era un jovencito con unos kilos de más y unas orejas enormes al que apodaron Michelín. Tuvo que ganarse el nombre de Michel convenciendo a todos de que era un gran jugador de fútbol.
Dice que uno de sus primeros recuerdos era el Día de Reyes. Pero la Navidad les tenía preparado un regalo un tanto distinto. Su padre tenía tres trabajos y vivían en casa de sus abuelos cuando les tocó la Lotería de Navidad. Fueron 230.000 pesetas de antaño, lo que facilitó su vida y les permitió independizarse.
Después de haber triunfado en el mundo del fútbol como futbolista ahora le tocaba ser padre. Una tarea que no le ha sido nada fácil teniendo en cuenta que ha sido su entrenador. "Mi hijo lo ha llevado mejor que yo. Es un tío con mucha personalidad. Entra en el vestuario como hijo de Michel y sale como Adrián".
Tras una charla cara a cara con Michel, a Bertín le tocaba enfrentarse al resto de una de las cuadrillas de fútbol más conocida de la historia del fútbol español. El primero en llegar era Butragueño, el origen de la Quinta. "Según mi padre, fui socio del Madrid desde el día que nací. Se presentó en el hospital para ver que estaba bien e inmediatamente se fue hacerme socio", comentó el ahora directivo del club blanco. Por mucho que se empeñasen en que se convirtiera en jugador de fútbol sus inicios en el Madrid comenzaron en el baloncesto.
A Butragueño le pasó todo lo contrario que a Michel. Si la familia quería que su futuro estuviese en el Real Madrid, el club blanco no se interesó por él y fue el Atlético de Madrid el que hizo la primera llamada para llevarse al Buitre. Pero su insistencia hizo que finalmente entrase en el equipo de sus sueños.
La anécdota de la noche
La gran anécdota de la noche la protagonizaba Michel. Durante años ha tenido que responder por el toque a las partes íntimas que le hizo a Valderrama en el 91. El jugador todavía bromea con esta imagen que le sigue persiguiendo. De hecho, a día de hoy ha tenido que responder a preguntas sobre sus gustos sexuales.
Por aquel entonces se casaba Butragueño y su fama le hacía cerrar el evento a los más íntimos, por los que sus compañeros de equipo se quedaron sin celebración. Sin embargo, el Buitre les invitó a una cena y Michel le tenía preparada una gran sorpresa: vestirse de boda. La compra de este atuendo sucedía poco después del incidente con Valderrama, lo que hizo de su pasión por disfrazarse de mujer algo todavía más morboso.