Carmen Pazos Bejarano, la educadora infantil que comparte negocio con la esposa de Ignacio González, nunca pensó que las plumas de sus 'Pollitos' saltarían por los aires y caerían en la mesa del juez Velasco. Menos aún, que fueran claves para mandar a Ignacio González, el expresidente de la Comunidad de Madrid, a la cárcel.
La joven salmantina es la fundadora de Mis Pollitos, una red de guarderías que nació en la Comunidad de Castilla y León en 2007 y que ha ido poniendo sus huevos por todo el territorio nacional. En diciembre del año pasado también se asoció con la mujer de Ignacio González para fundar Grupo Empresarial Chickies SL, una sociedad dedicada al "cuidado diurno de niños" constituida en diciembre de 2016 en Madrid y en la que también están presentes las sobrinas de Lourdes Cavero, Leticia y Rocío Bonet Cavero y su amiga M.T.d.M.A como secretaria y consejeras, respectivamente.
Carmen Pazos Bejarano, presidenta de Grupo Empresarial Chickies SL.
Pero hay un perfil que chirría en este mundo multicolor de los chiquitines. Es Alberto Pérez de la Sal, el CEO de la inmobiliaria Seinsa que vendió a los González Cavero el 'chollo' de mansión de 450 metros cuadrados en el barrio de Aravaca (Madrid) a un precio inferior al de mercado y con una rebaja de 200.000 euros. Pérez de la Sal no debía ser desconocido para Ignacio González. También fue consejero de Cofely, una de las empresas investigadas por el juez Eloy Velasco en la trama Púnica.
Alberto Pérez de la Sal, consejero delegado de Seinsa.
ASÍ ES LA RED DE GUARDERÍAS DEL 'DINERILLO B'
El juez Eloy Velasco considera que Ignacio González, su esposa Lourdes Cavero y su hermano, Pablo González, pusieron en marcha varios negocios con el objetivo de blanquear el dinero de origen ilícito de que disponían, según el auto de la Operación Lezo.
Precisamente la esposa de Ignacio González unió lazos empresariales el año pasado con una educadora infantil muy bien vista en Castilla-León y Madrid, donde ha ganado varios premios como emprendedora, para poner en marcha su propia red de guarderías. Un proyecto que se ha quedado congelado al salir a la luz todos los negocios ilegales de González e ingresar en prisión.
Carmen Pilar Pazos Bejarano puso en marcha Mis Pollitos en 2007, una red de guarderías de gestión propia, pública y privada concertada que tuvo su nidito en la sociedad Grupo Mis Pollitos SL, constituida en 2010 y que en 2015 tuvo un balance de ventas de 1,4 millones de euros.
Los centros Mis Pollitos, que ya han puesto el huevo en el resto de España (Barcelona, Sevilla, Salamanca, Valladolid, Madrid) se basan en un sistema de educación novedoso, que busca "romper con lo tradicional a través de la tecnología, los idiomas y una pedagogía integral para los niños", según su página web. Carmen Pazos es la CEO de esta empresa que "pone a disposición de otros franquiciados el soporte necesario para poner en marcha sus negocios".
Interior de una de las guarderías Mis Pollitos.
Su idea alzó el vuelo al poco tiempo de salir a la luz y en 2012 fue reconocida con el galardón a la mejor empresa emprendedora en la 'VIII Edición de los Premios PYME', en una ceremonia presidida por Esperanza Aguirre, por aquel entonces presidenta de la Comunidad de Madrid. Ese mismo año, Mis Pollitos ya gestionaba 3 guarderías propias, 6 de gestión pública y 1 privada concertada en Castilla y León y la Comunidad de Madrid. Con una plantilla de 66 profesionales, había hecho inversiones de 830.000 millones de euros.
En el año 2013, Pazos Bejarano también fundó el Grupo Empresarial Mis Pollitos SL, en el que entraron a formar parte el trabajador de una empresa de limpieza de montes de Castilla y León y un profesor de la Junta de Comunidades de la misma región a los que al parecer no les convenció el calor del nido de Pazos Bejarano y salieron de la empresa en el año 2014.
No es hasta 2017 cuando el apellido Cavero entra en contacto con las sociedades de Carmen Pazos Bejarano en la sociedad Grupo Empresarial Chickies SL, que todavía no ha presentado ningún informe al registro mercantil. Carmen Pazos es la presidenta de esta empresa en la que también está presente la esposa de Ignacio González, sus sobrinas y el CEO de la inmobiliaria a la que compraron la mansión de Aravaca, Alberto Pérez de la Sal.