Es el único bicho raro del clan Kardashian. Ya sea porque es el único de la familia cuyo nombre no empieza por K, o porque también es el único que no tiene especial relevancia en el reality de la familia, Rob Kardashian (30 años) es el marginado de la familia.
Aunque se supone que la verdadera vocación del joven se encontraba en la abogacía para seguir los pasos de su padre, del que heredó también el nombre, Rob no ha pisado jamás una clase en la que los principios de Derecho Romano se hayan impartido. Y parece no importarle. Se dedica a autocrearse él mismo polémica y a dar mucho que hablar.
El clan Kardashian-Jenner, mundialmente conocido por los enormes traseros de las hermanas, el reality, el mundo de la pasarela de Kendall (21) y los carnosos labios de Kylie (19), la pequeña de la familia; se caracteriza, además, por los dramas amorosos que les acechan día sí y día también. Si parecía que la trama de Kourtney Kardashian (38) y Scott Disick (34) era lo que podía desestabilizar el millonario imperio Kardashian, es porque todavía el heredero varón no había empezado a meter la pata.
Líos amorosos
La pequeña (y empresaria) de la familia, Kylie, rompió a principios de 2017 con el rapero Tyga (27), quien ha sido su pareja durante casi dos años y con quien tantas idas y venidas ha tenido. Pero hay (mucho) más. Durante la relación, Rob se dejó embaucar por las curvas de la modelo Blac Chyna (29), expareja de Tyga -el que por aquel entonces fuera novio de Kylie, y con el que comparten la custodia de King Cairo, su hijo-. Sí, hace falta leer dos veces para enterarse bien.
"Todo el mundo merece ser feliz", decía Tyga cuando le preguntaban por esta nueva incorporación al clan, mientras Kylie prefería no pronunciarse al respecto. El derroche de amor por las redes de Rob y Chyna era constante e incluso la inminente pareja iba a contar con un reality propio. La relación se consumaba con el nacimiento en diciembre del año pasado de un nuevo miembro para el clan. Blac Chyna traía al mundo junto a Rob -el hermano de la novia de su exnovio- a Dream. Un enredo de lo más épico que queda todo en familia y que parecía no importar demasiado al resto de las Kardashian, que seguían -y siguen- enfrascadas en sus negocios de maquillaje y en mantener sus páginas webs.
Pero poco duró la calma. Un nuevo episodio se abrió en el romance de Rob Kardashian y Blac Chyna, quienes de la noche a la mañana, rompieron su relación dejando constancia de ello en las redes sociales.
Serie de catastróficas desdichas
A las puertas de las celebraciones navideñas, a la modelo le hackearon la cuenta de Instagram filtrando una serie de mensajes y vídeos privados. ¿Lo mejor?, según publica People, Rob parecía estar detrás. Blac Chyna no se lo pensó dos veces: hizo las maletas y se fue de casa. Abandonó a Rob, o por lo menos así es cómo este se ha sentido, quien se ha dedicado a colgar fotos y vídeos de lo mal que lo está pasando. “Pensé que éste iba a ser el mejor año de mi vida… he tenido a mi preciosa bebé Dream, no he pasado las Navidades con mi familia durante varios años y ahora no puedo creer que me haya hecho este daño”, explicaba Rob.
Devastado, así se encuentra. Pero también resentido, sobre todo eso. Desde que la cantante pusiera fin a la relación, Rob se ha dedicado a mostrar a todos los seguidores del clan Kardashian lo mal que lo está pasando, y las redes sociales, han sido su mejor aliado. Tanto, que Instagram ha decidido suspenderle la cuenta por humillar a su expareja.
Vídeos llorando por la ausencia y pérdida de su bebé, o poniendo a caldo a Blac Chyna pidiéndole seguidamente que vuelva, hacen alarde del mal momento por el que está pasando el varón del clan. “Hoy Chyna me ha mandado un vídeo después de haberle comprado 250.000 dólares en joyas (...) y me manda este vídeo con otro hombre en nuestra cama”, escribe Rob en una publicación en la que se aprecia a la cantante con otro hombre.
El delicado filtro de Instagram ha dicho basta y ha decidido cerrar la cuenta de Rob tras la publicación de fotos íntimas y comprometidas de su expareja. Y este, como solución, ha trasladado toda su frustración a Twitter, donde ahora descarga la ira. "De verdad pensaba que Chyna quería formar una familia, y por eso fui tan leal. Pero he aprendido la lección, y todo el mundo tenía razón", escribe el hermano de las Kardashian.
Para calmar un poco el dolor, el mismo Rob se ha dedicado a subir memes de él mismo desolado sin su familia. No sabemos cómo acabará esta historia, pero quizá Rob comience a estudiar Derecho para encauzar su vida de nuevo.