Cuando Isabel García Tejerina (49) se acerca a "sus agricultores" de los campos de Castilla y les pregunta por la actual campaña o las últimas lluvias a pocos se les ocurrirá pensar que detrás de la sencilla mujer que calza mocasines planos y repite habitualmente vestuario se esconde la mujer más rica del Congreso de los Diputados.
La Ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente es, según su última declaración de bienes y rentas (presentada a finales de junio), la segunda más rica entre las dos cámaras españolas, por detrás del senador gallego Fernando Carlos Rodríguez Pérez, y la diputada más acaudalada.
La vallisoletana gana más dinero por sus actividades fuera de la política que como ministra. Mientras su sueldo anual por la cartera de Agricultura supera por muy poco los 66.000 euros, su sueldo anual como titular de una planta fotovoltaica que adquirió por 617.000 euros alcanza los 91.171 euros. Entre estos ingresos y el rendimiento por dividendos de Banco Santander, Telefónica e Iberdrola, Tejerina ingresó un sueldo anual de 167.649 euros en 2016.
Pero es solo una pequeña parte del extenso patrimonio de la discreta parlamentaria. Posee el 20% de los bienes inmuebles de dos sociedades de Valladolid, una con 18 pisos y otra con 7 pisos y 3 locales. Además, tiene unos ahorros de 940.000 euros repartidos en depósitos y cuentas corrientes de distintas entidades, le corresponde una herencia de 308.000 euros y el valor de sus acciones y participaciones supera los 800.000 euros. Por último, García Tejerina también tiene un plan de pensiones de cerca de 80.000 euros.
Como dice uno de los refranes populares que tanto gustan a la ministra y que suele utilizar en sus discursos, "no es más rico el que más tiene sino el que menos necesita", y parece que su sencillo estilo de vida le ha ayudado a acumular su gran fortuna. Tejerina no tiene familia. Es soltera y ha dedicado la mayor parte de su vida al trabajo, con puestos en la Administración del Estado vinculados a Agricultura. Es licenciada en Derecho por la Universidad de Valladolid e Ingeniera Agrónoma por la Universidad Politécnica de Madrid. Además, tiene dos másters en Comunidades Europeas y Economía Agraria, este último en California (Estados Unidos).
La autoexigencia es la máxima de la ministra, que encuentra su inspiración en personajes como el tenista Rafa Nadal, al que admira. A ella también le gusta mucho practicar tenis, así como esquí y otros deportes. Se nota en su figura y en sus brazos fibrados. Normalmente suele escoger vestidos de colores planos y cortes amplios y zapatos con muy poco tacón. Por eso, sorprendió mucho su estilismo elegido para el acto institucional del Día de la Hispanidad de 2015, al que acudió con un vestido morado de tirantes y gran escote que dejó a la vista su buen tipo.
Isabel García Tejerina fue educada en un colegio femenino de la Compañía de María de Valladolid, el equivalente a la institución de los Jesuítas en la educación religiosa masculina, donde aprendió los valores de la austeridad. En esta compañía en la que el lema es "Amar y Servir", las propias alumnas de los colegios limpian las instalaciones y aprenden a vivir con lo justo. Y parece que Tejerina ha seguido la senda que le marcaron las monjas porque a pesar de su fortuna se mueve en un antiguo Volvo S40 y paga religiosamente mes a mes un préstamo del que le quedan casi 340.000 euros.
A la ministra no se le conoce pareja, pero es una persona muy familiar, siempre cercana a sus cuatro hermanos (José María, Eugenio, Pablo y María) y sobre todo a sus cinco sobrinos, por los que siente devoción y a los que visita siempre que puede en Valladolid. Ellos fueron los protagonistas de su toma de posesión de la cartera de Agricultura en 2014 de manos de su predecesor, Miguel Arias Cañete. Revolotearon alrededor de su tía y jugaron incansables con su maletín, vestidos al estilo de 'Zipi y Zape'.