Abrió sus puertas hace unos meses y, tras el parón veraniego, apunta a convertirse en el local nocturno de moda para los denominados 'cachorros de la Jet', los hijos de la alta sociedad española. Supernova, que así se llama el club privado, está en el número 14 de la calle Argensola de Madrid, en el barrio de las Salesas.

En los últimos años este barrio se ha convertido en el pequeño "Tribeca" madrileño, con la apertura de concept stores y bares y restaurantes donde tomar el brunch, al estilo de su homónimo neoyorkino. Pero en el vecindario, donde conviven también muchos empresarios franceses y belgas, existen pocas discotecas o clubes nocturnos.

De ahí que Alonso Aznar (27 años), hijo del expresidente del Gobierno José María Aznar, y su amigo Felipe Cortina (35), hijo del expresidente de Repsol Alfonso Cortina y Myriam Lapique, hayan apostado por esta nueva coctelería que ya es el rinconcito secreto del grupo de amigos mejor relacionados de la capital. Aunque ninguno de los dos aparece en la sociedad propietaria del negocio, fuentes de su entorno más próximo han asegurado a EL ESPAÑOL que lo han impulsado ellos mismos.

El local lleva varios meses abierto y no han querido darle mucha publicidad, porque precisamente eso es lo que lo convierte en exclusivo. Se trata de un discreto local con una amplia cristalera a la calle, tras la que se esconde el club nocturno privado de algo más de 200 metros cuadrados donde solo entran quienes "están en lista". 

La decoración, con cortinas de terciopelo rojo, pequeñas mesitas negras y sillas retro, recuerda a las salas privadas de jazz del citado barrio Tribeca del sur de Manhattan, en Nueva York, centradas en la buena música y los buenos licores. Precisamente la música es uno de los fuertes del local en el que están volcados los amigos, donde pincha habitualmente Emilio Pan de Soraluce (aka Dark Places) también amigo de la exclusiva pandilla. El joven músico (34) ha vivido en Reino Unido, Barcelona, Bruselas, Miami o Marbella, en parte por motivos familiares, lo que le ha ayudado a tener un estilo propio en la música electrónica. En alza en su sector, también pincha en el Teatro Kapital y escenarios internacionales.

Todo queda en familia en el entorno de estos jóvenes que, después de formarse por el mundo, han vuelto a Madrid (su casa) con espíritu emprendedor. Tanto Felipe Cortina como Alonso Aznar estudiaron en el prestigioso Colegio Universitario de Estudios Financieros (CUNEF), y ambos han volcando su aprendizaje en la puesta en marcha de empresas. Cortina es el impulsor de Jimmy Lion, una exitosa marca de calcetines lanzada en Nueva York con una red de ventas online por todo el mundo.

Aunque Alonso Aznar es más joven, también cuenta con una imparable carrera. Hace unos años ya entró a formar parte de la sociedad del restaurante Pipa & Co en el barrio de Cuzco de Madrid. Después de trabajar en las oficinas de Citibank de la City londinense durante algo más de cuatro años, volvió a España tras fichar por un fondo de capital riesgo, Rhone Group LLC, puesto que ha combinado con su actividad como empresario.

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