Pocas familias con la relevancia económica de los asturianos Masaveu han conseguido mantenerse alejados de las crónicas sociales como ellos durante décadas. Siempre han evitado que su apellido apareciera en prensa que no fuera económica. El hermetismo de los miembros de la familia con la prensa del corazón ha sido siempre absoluto. Ni siquiera las bodas familiares han tenido repercusión. De ahí que, salvo aquellos que siguen la información económica, la gran mayoría de españoles apenas hayan oído hablar de los Masaveu.
Esta semana, cuando Liberbank vuelve a estar en el punto de mira (sus acciones se han disparado por los rumores de compra y la ampliación de capital de 500 millones de euros anunciada a principios de mes), este apellido salta a la palestra inevitablemente.
La familia, con Fernando Masaveu Herrero al frente, ostenta el undécimo puesto de las mayores fortunas españolas, con un patrimonio valorado en 2.500 millones de euros, según la lista Forbes. La Corporación Masaveu creció 100 millones de euros durante 2016, año que concluyó con unos beneficios de casi 24,5 millones de euros para el grupo.
Quinta generación de empresarios
Aunque la familia Masaveu lleva ya casi dos siglos asentada en Siero (Asturias), procede de Castellar de Vallés (Barcelona). Desde allí partió Vicente Masaveu, el fundador de la empresa familiar, en busca de un futuro prometedor. Comenzó a trabajar como aprendiz en la casa de comercios de Oviedo. Su hijo fundaría después Banca Masaveu. En el concejo de Siero (centro de la región de Asturias) se encuentra el palacio de Hevia, la residencia familiar convertida ahora en sede de la Fundación María Cristina Masaveu.
En este momento, Fernando Masaveu Herrero está al frente de la Corporación Masaveu, con un activo que alcanza la friolera de cerca de dos mil millones de euros. Una barrera (la de los 1.000 millones) que superan muy pocas empresas españolas, entre ellas la del gallego Amancio Ortega (Inditex).
La participación de la familia Masaveu en Liberbank siempre ha sido muy importante. La familia posee el 5,6% de las acciones del banco. Además, tienen otros negocios en ámbitos tan dispares como el de las cementeras, los aparcamientos semipúblicos o el negocio inmobiliario.
Si Abanca (propiedad del grupo venezolano Banesco) quiere comprar Liberbank como se ha sabido este viernes, tendrá que convencer a los Masaveu y al resto de accionistas. El presidente del banco, Manuel Menéndez, no está por la venta. En ese sentido ha tomado medidas como la ampliación de capital de 500 millones de euros anunciada a principios de septiembre. También se ha deshecho de los activos tóxicos inmobiliarios.