Cuando el pasado 11 de noviembre Gregorio Sánchez Fernández, el mítico Chiquito de la Calzada, fallecía tras unos días ingresado, pocos se imaginaban el revuelo informativo que se iba a crear. Por no hablar del cisma familiar que originaría el fatal desenlace del cómico. Las muestras de cariño que recibió el malagueño desde todos los ámbitos de la sociedad quedaron emborronadas por las especulaciones acerca de sus últimos años de vida.

Su familia se ha sublevado y las rencillas familiares no han tardado en manifestarse, no solo por la herencia de Chiquito, sino por quiénes estuvieron a su lado desde que en 2012 murió su mujer, Pepita. El programa Sálvame se ha convertido en la mayor plataforma de debate familiar. Unas sobrinas aseguran que Chiquito se endiosó cuando saboreó las mieles del éxito; otras, que no quiso ver a nadie cuando murió su mujer; y las menos que dio de lado a su familia y no quiso que nadie lo ayudara.

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Pero, ¿qué hay de cierto en estas informaciones? JALEOS se ha puesto en contacto con un buen amigo del humorista, que estuvo a su lado en sus últimos años, en los más fatídicos de su vida. Esa persona es el pintor Antonio Montiel. "Nosotros tuvimos una amistad de muchos años. Nos conocimos a través de otros amigos y desde entonces se forjó una bonita amistad. Hemos pasado las últimas doce Navidades juntos. Y cuando digo las Navidades es al completo: Nochebuena, Nochevieja y Año Nuevo", asegura Montiel. 

Montiel: "No es verdad que estuvo solo"

¿Cómo fueron sus últimos años de vida?, pregunta este medio. Al otro lado de la línea, este amigo se muestra tajante: "No es verdad que estuvo solo, en absoluto. Es alucinante que se digan esas cosas en televisión. Es verdad que cuando murió Pepita tuvo un bajón grande y quedó cabizbajo. Pepita era su pilar y una mujer que siempre lo llevaba como un pincel. Lo llevaba controlado en todos los sentidos". ¿Fue Chiquito un hombre que se aisló por la pena? "No tuvo ánimo para muchas cosas, pero no negaba la compañía tampoco. Él era un hombre que salía a la calle, iba siempre al mismo bar, al de la calle Larios. Allí lo conocían muy bien y lo trataban como a un familiar. Estos últimos años estuvo a su lado su sobrina Loli", apunta el artista. Aparte de Loli, ¿ningún familiar lo visitaba? "Que yo sepa, no", responde Montiel. 

Así fueron sus últimas Navidades

¿Cómo fueron sus últimas Navidades? "Siempre las pasaba conmigo, se venía con amigos comunes", responde esta fuente. Pero, ¿dónde estaba su familia en días tan señalados? "Eso es lo que más me sorprendía. Es verdad que desde que faltó Pepita no buscaba demasiado la compañía, pero tampoco sonaba su teléfono para nada. Esos días tan entrañables los pasaba conmigo, yo era su única compañía. No me hablaba mucho de su familia". 

¿Cómo era Gregorio cuando se quitaba el 'disfraz' de Chiquito? "Era una persona muy alegre, siempre con el chiste a punto. Era el alma de la fiesta, aunque también tenía su carácter y su genio, ¿eh? Como amigos hemos pasado por diferentes broncas", ha asegurado Antonio. 

"Paz Padilla no tuvo tanto contacto con él"

Desde que el cómico desapareciera, ha habido una persona que lo ha defendido a ultranza: Paz Padilla (48). La presentadora de Sálvame se ha mostrado estos días derrumbada en el plató de Telecinco; Chiquito era como un padre para ella. ¿De dónde viene ese vínculo tan fuerte? "Yo tampoco creo que Paz tuviera tanto contacto con Chiquito, a mí nunca me la nombraba y no salía en nuestras conversaciones. Otro cosa es como cada uno gestione sus emociones". 

Hace unos días, un familiar del artista aseguró en Sálvame que Chiquito era un hombre tacaño y que nunca compartía ni su dinero ni nada de su vida, pese a necesitarlo algún miembro de la familia. ¿Qué hay de verdad en esto? "Gregorio amasó un importante patrimonio, eso es innegable. Dinero tenía, pero era un hombre muy generoso con los demás. Sí es verdad que en él mismo no gastaba. No era un hombre de grandes lujos". Dicen los que lo conocieron que su mayor lujo era hacer reír. 

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