El nombre de Edmundo Arrocet (67 años) cobró fuerza en el año 2014 cuando salió a la luz la relación sentimental que había iniciado con la presentadora María Teresa Campos (76). El cómico y la malagueña unían sus vidas contra viento y marea, por encima del revuelo mediático y de las habladurías. Al poco tiempo de hacerse público su amor, el humorista se instalaba en el casoplón de la periodista en Molino de la Hoz (Las Rozas).
Por entonces, cada sábado y domingo la pareja se regalaba caricias y arrobadas miradas en Qué tiempo tan feliz. En ese programa no solo trabajaba Teresa, Bigote también. De hecho, sus chistes y baladas eran lo único que quedaba de una vida profesional repleta de trabajo.
Sin embargo, cuando el espacio se canceló, los ingresos también. Ambos se quedaban sin trabajo, pero con una diferencia fundamental: María Teresa batalla por volver y Edmundo por "irse a vivir a Málaga o Canarias". Si por él fuese, se iría mañana mismo, tal y como aseguró en su última aparición pública. Mientras la presentadora aprovecha cualquier programa de televisión para insistir en que se está preparando un programa a su medida y que pretende seguir "un poquito más", Edmundo, ¿a qué se dedica?
Según el registro mercantil, a nivel empresarial el chileno no atraviesa, precisamente, una situación boyante: tiene a su nombre cuatro sociedades y todos sin actividad y algunas con sendos saldos negativos. Desde que en 1978 fundara su primera empresa, su actividad ha sido intermitente y nada fructífera.
"Bigote no está sin hacer nada"
Aparte de este punto, Bigote tampoco cuenta con ingresos al no trabajar ni como cómico ni como cantante. Entonces, ¿cuál es su día a día? JALEOS se ha puesto en contacto con una buena amiga suya, la empresaria Gemma Serrano.
Ella conoce al cómico desde hace años, les une una bonita amistad pese a la guerra declarada que existe entre ella y el clan Campos. "Bigote no está sin hacer nada, es intermediario de empresas, es decir, hace de enlace para abrir empresas tanto en España como en Chile", aclara Gemma a este medio.
Según este testimonio, la pareja de Teresa Campos es un hombre activo que no para de crear y pensar en proyectos: "Sé que tiene varias empresas de almendros y olivos fuera de España, aunque no a su nombre, sino al de sus hijos. Cuando murió su mujer todo lo pasó a nombre de sus hijos".
Independientemente de estas actividades, el humorista contaría con un respaldo económico como resultado de tantos años trabajados: "Lo que pasa es que es un alma libre". En ese punto también coincide María Teresa, quien siempre ha asegurado que a Edmundo le encantaría vivir entre la naturaleza, hecho que quedó demostrado en su participación en Supervivientes.
Su 'mal rollo' con Teresa y su amistad con Bigote
Gemma Serrano no entró con buen pie en el clan Campos. Unas imágenes de ella y Edmundo entrando y saliendo, siempre por separado, de un apartamento del chileno desataron los rumores acerca de la verdadera relación que los unía. En ese momento se abrió una brecha insalvable entre las malagueñas y Gemma. De hecho, la empresaria ha llegado a reconocer que María Teresa ha puesto torpedos en su carrera profesional desde aquellas imágenes con Edmundo.
¿Cómo está ahora su relación con Bigote? "Seguimos siendo igual de amigos, nos llevamos muy bien. De hecho, él va a colaborar en una gala solidaria que organizo con Los Vivancos. Si me llevara mal, ¿colaboraría Bigote? Todo sigue igual", ha asegurado Gemma. ¿Y su relación con las Campos?, insiste este medio. "Con Edmundo me llevo muy bien", responde sagaz.