El clan Franco vive este jueves una cita histórica. Cada vez es más difícil ver a todos los miembros de la familia juntos en un mismo lugar; es algo que solo ocurre en situaciones excepcionales. Y así ha sido este 24 de octubre con motivo de la exhumación del dictador y su posterior traslado desde el Valle de los Caídos al cementerio de El Pardo-Mingorrubio donde descansará junto a su mujer Carmen Polo.

La anterior reunión de los miembros de apellido Franco sucedió el 31 de diciembre de 2017 en la cripta de La Almudena por la muerte de la hija del dictador, Carmen Franco. Carmencita, su única descendencia directa, se casó con el cardiólogo Cristóbal Martínez-Bordiú, X Marqués de Villaverde, en 1950. De la unión de la hijísima con este aristócrata con maneras de señorito nacieron siete criaturas: Carmen, María de la O -Mariola-, Francisco, María del Mar -Merry-, José Cristóbal, Arancha y Jaime.

Como satélite de esta saga familiar funciona una cara típica de los platós de televisión. José María Martínez-Bordiú, más conocido como Pocholo, es sobrino de Cristóbal Martínez-Bordiú y por tanto, sobrino-nieto de Francisco Franco.

Carmen, la mediática

Nació casi como una princesa en el Palacio de El Pardo un año después del matrimonio de sus padres y con la edad incluso adquirió el rango. La primogénita y nieta favorita de su abuela Carmen Polo siempre fue un alma libre. Viajera, amante de la moda y con múltiples amoríos, su desparpajo conquistó, entre muchos hombres, al que sería su primer marido.

Él era el descendiente más legítimo al trono de Francia -con permiso de los Orleans-, el fallecido Alfonso de Borbón, nieto de Alfonso XIII y primo del rey emérito Juan Carlos, que tenía quince años más que ella. De esa unión nacieron dos niños, Francisco de Asís, que murió con apenas doce años, y Luis Alfonso.

Después, ella, de espíritu inquieto, se hartó y dejó al Borbón por un anticuario que le llevaba tres décadas: Jean Marie Rossi, con quien tuvo a su tercera y última hija, Cynthia. Es la estrella más brillante de un clan poseído por los claroscuros. Su currículum amoroso es fácilmente rastreable en las hemerotecas de la prensa del corazón patria.

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Mariola, la más tímida

La segunda de las Martínez-Bordiú siempre fue discreta, siempre trató de mantenerse en un segundo plano. María de la O, Mariola, era la sombra de su hermana Carmen. Eran la noche y el día, las dos caras de una misma moneda. Frente al descaro de Carmen, la timidez de Mariola. Cada una se encontraba sumamente cómoda en su rol, ya que mientras Carmen disfrutaba de su estrella, Mariola era feliz no siendo el centro de atención.



Es arquitecta de carrera, aunque jamás llegara a ejercer. Se casó con Rafael Ardid, nieto de republicanos condenados a trabajos forzosos, con el que continúa más de treinta años después.

Tienen tres hijos, Borja, Jaime y Javier fruto de ese matrimonio, por el que Mariola luchó, incluso enfrentándose a su padre. Hubo que posponer el enlace en tres ocasiones. Al final, a la cuarta fue la vencida y contrajeron matrimonio en El Pardo. Fue a la última boda familiar a la que acudió el 'generalísimo' Francisco Franco.

Francisco, el empresario

El tercero hijo de la pareja se llamó como el abuelo, Francisco. Fue el primer varón de los Martínez-Bordiú y recibió la orden del dictador de continuar con el legado de la saga Franco. Nació en 1954 y es el heredero de los títulos nobiliarios paternos -Marquesado de Villaverde- y maternos -Ducado de Franco-.

Francis, como es conocido, se cambió el orden de los apellidos para poder llevar el Franco por bandera: buscaba "perpetuar el legado familiar". Estudió medicina pero su carrera se centró en los negocios. Sus empresas son principalmente de explotación y dirección de centros sanitarios y laboratorios de análisis. También trabaja en el sector de las telecomunicaciones e Internet.

El marqués de Villaverde y duque de Franco se ha casado y divorciado dos veces: la primera vez con María de Suelves y Figueroa, descendiente de Francisco de Paula de Borbón y Castellví. Tuvo con esta dos hijos, Juan José Franco y Francisco Franco. Se divorció en 1992 y dos años más tarde conoció a Miriam Guisasola Carrión con la que tuvo otros dos hijos: Álvaro Franco y Miriam Franco. Ahora, al morir Carmen Franco, Francis cederá a su hermana Carmen el marquesado de Villaverde tras un conflicto familiar. La nietísima reclamó su derecho de ser marquesa al ser la primogénita. Carmen Franco intercedió para no ahondar en la brecha.

Merry, la bohemia

Nació en 1956. Era la cuarta hija de los marqueses de Villaverde. Estudió restauración. Se la considera la más hippie de la familia, pues se dedicó a vivir y viajar por el mundo. Se casó con el periodista y enfant terrible Jimmy Giménez-Arnau con tan sólo 21 años, pero fue un matrimonio breve y tormentoso. Se separaron tras tener una hija en común, Leticia. Después de eso, residió durante un tiempo en España, hasta que se enamoró de Greg Tamler. Volvió a casarse, se mudó a Estados Unidos y se divorció.

Ha ejercido como profesora de inglés y ha vivido en Canarias, Miami y en las Islas Vírgenes. Era la nieta favorita del otrora Jefe de Estado, pese a su rebeldía. 

José Cristóbal, el militar

Quizás, de todos los Martínez-Bordiú Franco, es el que ha conseguido que su vida sea la más discreta. Es el quinto hijo y nació en 1985. Se graduó en la Academia Superior de Zaragoza como alférez tras haber estudiado varios años de Arquitectura y Ciencias Físicas.

Llegó a ser teniente y, de haber continuado en las fuerzas armadas, hubiese sido el segundo general más joven de la historia, sólo precedido por su propio abuelo. En el sexto aniversario de la muerte del dictador, atropelló con su coche a un matrimonio en Las Palmas de Gran Canaria. La mujer murió inmediatamente y el hombre falleció esperando a la ambulancia. Pese a que la responsabilidad no fue suya -los fallecidos atravesaron una vía sin paso de peatones-, el accidente le dejó tocado: abandonó el ejército. Según sus propias palabras, "porque el uniforme me hacía cara de gilipollas”.

Se ha casado y divorciado una vez: con María José Toledo, modelo y conocida presentadora de programas del corazón y cine (Cartelera, Gente y Corazón, corazón). Tiene dos hijos, Daniel y Diego.

Arancha, la única sin descendencia

María Aránzazu, más conocida como Arancha, es la única hija de Carmen Franco que no tiene desdencencia. Estudió secretariado industrial, pero tiene una empresa de restauración de muebles. Realmente, es más su hobby que su principal ocupación.

Arancha se casó en 1996 con el abogado coruñés Claudio Quiroga Ferro, de familia gallega acomodada, tras ser novia muchos años de su primo Alejo Martínez-Bordiú.

Jaime, el adicto

Es el más pequeño de los hermanos, pero también de los más conocidos del clan a nivel mediático. Sus relaciones amorosas, con una condena de malos tratos incluida, han saltado muchas veces a los titulares de la prensa rosa.Se licenció en Derecho por la Complutense y ejerce de abogado. Como el mayor de sus hermanos, también es propietario de varias sociedades y forma parte del consejo de administración de unas tantas empresas. Francoveda SL; Proazca SA; Urme SA; Fiolasa SL; Sargo Consulting SL; Albargente SA; MGO Consulting Sl; y Abanco SL. Sus negocios se centran principalmente en la construcción. Jaime se casó en 1995 con la modelo y relaciones públicas Nuria March Almena. Tienen un hijo, Jaime. Años después, se separaron. En 2009 fue condenado a un año de cárcel por haber maltratado y amenazado a su novia, Ruth Martínez. Sus escándalos no se quedaron ahí: fue él mismo quien confesó en un programa de televisión que era adicto a la cocaína.

Sus nietos: de Luis Alfonso, su ojito derecho, a los problemáticos Franco Suelves

Luis Alfonso de Borbón (43), hijo de Carmen Martínez-Bordiú, es el nieto al que más apegada estaba Carmen Franco. El marido de Margarita Vargas (34) sentía gran admiración por su abuela, de quien destacaba "sus ganas de saber, su elegancia y su valentía", unos valores que le inculcó a él y por lo que la considera "su segunda madre".

Además de ser el más cercano a su abuela, también es de los bisnietos de Franco más conocidos junto a su hermana, Cynthia Rossi, fruto de la relación de su madre con Jean Marie Rossi. El que sería el mayor de los hermanos, Francisco de Asís, murió a la temprana edad de 11 años en un accidente de coche en 1984.

Del resto de sus nietos poco se sabe. La mayoría tienen tienen entre 20 y 30 años, por lo que llevan su vida de forma libre y en el anonimato. Quizá Daniel y Diego Martínez-Bordiú sea los nombres que empiecen a sonar en la prensa rosa, ya que así ha ocurrido con el primero de ellos por su belleza, heredada de su madre, José Toledo. La que sí intenta vivir con mucha privacidad es la hija de Jimmy Jiménez-Arnau y Merry Martínez-Bordiú, Leticia, que apenas existen imágenes de ella -como de muchos otros nietos-.

Sin embargo, los hijos de Francis Franco y María Suelves, que permanecían 'ocultos', han salido a la luz pública por el escándalo de Los papeles de Panamá en los que aparecen sus nombres. Su condición de cazadores les ha traído algún que otro problema. No obstante, esas dificultades siempre han sido por entes externos, nunca familiares, ya que, según su entorno, a pesar de haberse querido desvincular de lo que significa su apellido, Juanjo y Francisco Franco son "muy sociables con el resto del clan" y "se llevan muy bien con sus primos".