David Summers (53 años) ha decidido poner punto final a la relación que mantenía con la que ha sido su compañera durante casi media vida: Marta Madruja. La pareja fue una de las más consolidadas del panorama musical, y es que vivieron en un feliz matrimonio durante 25 años con dos hijos de por medio: David y Lucía.
Como en cualquier relación, ahora que la pareja ha decidido finalizar su vida en común llega el momento del reparto del patrimonio, un asunto un tanto peliagudo en cuanto a que el músico, cantante y compositor de uno de los grupos más importantes de la historia musical española como es Hombres G, posee varias compañías, derechos musicales e incluso un libro.
Músico y empresario a partes iguales
La primera empresa del cantante de la que se tiene constancia es la que constituyó junto a sus compañeros del grupo de música del que recibe el nombre la compañía: Hombres G. S.L. La empresa se constituyó en 1987, en pleno auge del éxito de esta banda, para la gestión de salas de espectáculos.
Pero esta no fue la única compañía que creó junto a sus compañeros. Posteriormente, y años después de que el grupo se volviera a unir para seguir conquistando escenarios, David y sus compañeros constituyeron en 2008 Summus Management S.L, para la gestión de salas de espectáculos, y que actualmente se encuentra en proceso de liquidación voluntaria.
Sin embargo, de nuevo, esta empresa no llegó a buen puerto, algo que no desanimó a los integrantes de Hombres G, que volvieron a juntarse en junio de 2010 para constituir la empresa La calabaza amarilla SL, para la creación, organización y explotación de actividades culturales, musical, lúdicas y deportivas.
Esta compañía es la que actualmente le suponen los ingresos principales a David, y es que en 2016 (último año en el que se presentaron cuentas en el Registro Mercantil) facturó ni más ni menos que 1,3 millones de euros, consiguiendo acumular un activo a esas alturas de 167.000 euros, con una deuda cuya cifra es similar.
No obstante, estas compañías creadas junto a sus compañeros solo constituyen una parte de del entramado empresarial que David ha conseguido crear a lo largo de estos años.
La primera que constituyó fuera del grupo musical fue en 1989, Recolero SA, una empresa familiar en la que figuraba su padre como presidente junto al cantante. La compañía se creó para las actividades de producción cinematográfica y de vídeo, una compañía que en su momento tenía un capital social de 60.101 euros (una cifra nada desdeñable teniendo en cuenta que el mínimo exigido por ley es de 3.000 euros).
Pero David esperó poco tiempo para volver a constituir otra empresa, y es que en 1990 ya fundó la compañía Ediciones Mundo Naranja S.L, de la que es administrador único y la cual se dedica a la edición de obras musicales realizando todas las actividades propias del editor musical tales como la edición, promoción y explotación de derechos de autor. De nuevo, con esta empresa el artista ha conseguido acumular un gran activo, concretamente: 170.000 euros.
A esta hay que unir la compañía Samer Music S.L., de la que es administrador único y la cual creó en 1995, dos años después de que abandonara Hombres G y decidiera empezar su carrera musical en solitario. Esta empresa se constituyó para la producción musical, sobre todo de actividades propias de editores musicales, como la edición, promoción y explotación de los derechos de autor de obras musical originarias y sus transformaciones. Este negocio ya en 2006 (última fecha de la que se disponen datos en el registro mercantil) facturaba 229.000 euros, con un activo total bastante considerable: 836.000 euros.
A esto hay que añadir los ingresos que el actor haya conseguido acumular a lo largo de estos años, mayormente gracias a su carrera musical, tanto con la venta de discos, con los conciertos como con los derechos de autor (David es compositor además de músico y cantante).
Asimismo, y aunque es poco conocido, el artista escribió el libro Hoy me he levantando dando un salto mortal, puesto a la venta el año pasado con la editorial Alienta. Es una obra que, como él mismo compartió en un twitter en diciembre de 2017, se llegó a situar en el número uno de ventas.
Nuevo amor
David Summers y Marta Madruga tomaron la decisión de divorciarse después de 25 años de un matrimonio feliz en el que han sido la envidia de muchas parejas. Sin embargo, el luto le ha durado poco al artista, y es que ya ha comenzado una nueva relación, según publicó a principios de febrero Diez Minutos.
El nuevo amor que ha conquistado el corazón del cantante se llama Christine y es una joven profesora de inglés. Por el momento ya se ha visto a Summers de la mano de este bellezón por las calles de Madrid. Asimismo, dejó pistas de este nuevo romance en el libro que publicó el año pasado con la dedicatoria: "A ti, aunque no sé si vas a leerlo".