El divorcio de Arantxa Sánchez Vicario (46 años) y Josep Santacana va a traer cola. Desde que se hizo publica la separación a mediados de febrero, la guerra entre ambos bandos se ha recrudecido hasta el punto de que ni siquiera se ponen de acuerdo sobre dónde quieren ser juzgados; mientras ella quiere hacerme mediante la corte de Miami, él ha interpuesto la demanda en España.
Los hijos son el mayor punto de conflicto, ya que, según la versión de Arantxa es ella quien les cuida cada día, pero Josep asegura que no puede ejercer de madre por supuestos problemas psicológicos. Entre tanto, una de las sorprendentes noticias que se hicieron públicas al conocerse el divorcio fue que Santacana había huido con todos los trofeos de la tenista. Pues ahora ha querido arreglar ese asunto.
Las decenas de trofeos permanecen guardados en cajas en dos locales que pertenecen a la familia del empresario. Se quedaron allí cuando la pareja se trasladó a vivir a Miami, pero dada las circunstancias actuales Santacana ha tomado una decisión: pedir a Arantxa que los recoja y se los lleve. Según cuenta el portal LOOK, Josep ha hablado con sus abogados para que notifiquen a los letrados de Sánchez Vicario que tiene a su disposición las 150 cajas con los premios y equipación deportiva.
El propio Santacana ha acumulado todo en una de las salas donde han permanecido durante años. Este gesto del empresario ha sido realizado junto a un notario que ha sido testigo de que todos y cada uno de los trofeos de Arantxa están 'a salvo' y dispuestos para su recogida. Los abogados de la tenista ya han gestionado el modo en el que se harán con los premios de su clienta y ya han avisado para que una agencia de transporte de bienes se pase a recogerlos, también con la presencia de un notario que acredite la totalidad de los trofeos.
Josep Santacana ha querido poner fin con este movimiento a las impresiones de quienes le señalaban por querer aprovecharse de la imagen de Arantxa, y da a entender así que todo lo que le recuerde a la tenista en estos momentos no hace más que estorbar en su vida. Además, con este aviso también ha querido mostrar que en ningún momento quiso quedarse con lo ganado por la deportista, sino que estaban en un lugar que se acordó en su momento para que pudieran rehacer su vida en Miami.
Este nuevo capítulo del divorcio Sánchez Vicario-Santacana es solo un episodio más de lo que aún queda por solucionar. El periplo judicial será largo y como un partido de tenis, habrá que girar la cabeza de lado a lado para ir viendo los ataques y reveses de cada uno.
[Más información: La estrategia del marido de Arantxa Sánchez Vicario para quedarse con todo: los hijos y los trofeos]