Bernard Arnault (69 años) ha desbancado a Amancio Ortega (82). El español ya no es el hombre con más dinero dentro de las compañías de moda. El empresario francés ha desplazado al empresario patrio al alzarse como el cuarto hombre más rico del mundo según Forbes con una fortuna de 70,7 billones de euros. 

El francés es la cabeza visible de LVMH, la multinacional líder en productos de lujo en Francia. Arnault comenzó sus andanzas en el mundo de la moda de una forma muy distinta al creador de Inditex. Mientras Ortega comenzaba en una humilde tienda de batas en Galicia, el francés redirigió el destino de su empresa familiar con la venta de las acciones. Ahí, en 1971, inició su aventura en la compra venta de acciones de grandes multinacionales. 

Arnault es el magnate más poderoso del mundo de la moda. Es el propietario del grupo de artículos de lujo LVMH. Bajo su mando está el conglomerado Moët Hennessy -Louis Vuitton, que reúne grandes marcas como Givenchy, Loewe, Bvlgari y Fendi. 

Uno de los personajes más relevantes en la alta sociedad española tiene una gran presencia en el conglomerado de Bernard Arnault. Jaime de Marichalar (55) trabaja para el magnate en LVMH. La relación entre el ex yerno de Juan Carlos (80) y el empresario no se ciñe al ámbito de los negocios. Ambos mantienen una estrecha relación de amistad. Tal es así que se les ha visto disfrutando de su tiempo libre, incluso divirtiéndose en desfiles de moda.

Marichalar es el asesor de LVMH en España. El español, uno de los trabajadores de confianza, ha acompañado al francés a más de un desfile de la firma Dior, marca que forma parte del conglomerado.  

El CEO de lujo se mueve en el entorno más exclusivo de Francia. Entre su círculo de amigos más estrecho se encuentra el expresidente francés Nicolas Sarkozy (63). Bernard Arnault fue uno de los testigos en la boda del político con Cécilia Sarkozy, su primera mujer. La relación no termina ahí, el empresario estuvo presente en el hotel Le Fouquet's la noche de la elección de Sarkozy como presidente. 

Bernard Arnault ha creado un imperio nada discreto, sin embargo, su vida personal siempre se ha mantenido en la más estricta intimidad. El magnate se ha casado en dos ocasiones. Fruto de su primer enlace nacieron sus dos hijos, Delphine y Antoine. Ambos trabajan junto a él en LVMH. La mayor es la administradora de la compañía desde 2004 y el segundo es el director de comunicación de Louis Vuitton y director ejecutivo de Berluti. Ahora, Arnault está casado con Hélène Mercier-Arnault, una pianista canadiense con la que tiene tres hijos. 

En los últimos meses, el empresario ha mantenido polémicas reuniones con el actual presidente de Estados Unidos. Arnault y Trump han hablado de negocios en una conversaciones, que según dijeron después a la prensa, "habían discutido grandes cosas, cosas maravillosas". 

François-Henri, el marido de Salma Hayek (51), es uno de los amigos cercanos del millonario. El también empresario y Arnault mantienen una amistad fraguada entre las oficinas, los despachos y las grandes compañías. 

Bernard Arnault ha desbancado al representante patrio en la empresa textil pero su vida personal no tiene nada que ver con la del gallego. Amancio Ortega, siempre discreto y rodeado de un discreto círculo de acompañantes nada tiene que ver con su actual sucesor, un empresario que baila entre los desfiles y las celebrities. 

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