Sandra Ortega Mera (49 años) nació en A Coruña. Se crió en un dúplex en el paseo de Ronda,en Riazor, como la hija mayor de un matrimonio con dos hijos. Desde su infancia ha llevado una vida lo más normal posible: estudió en un instituto público, se casó con su amor de juventud (Pablo Gómez), llevaba a sus hijos al colegio en su viejo Renault... Todo cotidiano, salvo por un detalle: su padre es Amancio Ortega (81) y su madre era Rosalia Mera, las personas más ricas de España. El matrimonio se divorció en 1986, cuando Sandra alcanzaba la mayoría de edad. Desde 2013, tras la muerte de su madre, Sandra ocupa el título de la mujer más rica de España.
Recientemente ha vuelto a la palestra pública ante un artículo que ha publicado El País, sobre cómo ha gestionado la hija mayor de Amancio Ortega su patrimonio, hasta conseguir formar un imperio inmobiliario.
Muy distinta a su hermanastra Marta
Lo único que comparten Sandra y Marta Ortega (33) es el apellido. Desde la educación al carácter, las dos hermanas han tomado caminos totalmente separados. Mientras Marta estudió en los mejores colegios privados, pasando por un internado en Suiza, Sandra tomó la decisión de dejar el colegio religioso al que iba para estudiar tercero de BUP y COU en el instituto público Ramón Menéndez Pidal.
Marta es un rostro conocido de la alta sociedad española y sus apariciones públicas acaparan toda la atención de los medios. En cambio, Sandra ha optado desde siempre por un perfil más discreto: hasta el fallecimiento de su madre no se conocían fotos de ella.
A eso se suma que, a pesar de ser la mujer más rica de España, no hace alarde del dinero ni hace grandes gastos: conduce su viejo Renault, ella misma se tiñe el pelo de su rojo característico, se aleja de las marcas... En cambio, Marta es conocida por su afición a la hípica, sus vacaciones en yates, las grandes fiestas de cumpleaños...
Aún con todo ello, lo cierto es que Sandra es mucho más parecida a Amancio Ortega que su hermanastra Marta. Ambos tratan de llevar su vida con la máxima discreción. Se alejan del lujo y de la ostentación. Además, tienen un buen olfato para los negocios, y es que Sandra ha conseguido rentabilizar al máximo la gran parte de sus inversiones.
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La "verdadera heredera" del imperio Inditex
Según el reparto del patrimonio de Amancio Ortega, la "verdadera heredera" del imperio Inditex no sería Marta, sino Sandra. Actualmente, el empresario tiene el 59% de las acciones de la compañía, un patrimonio que a su muerte se repartirá entre sus tres hijos: cada uno obtendría un 19,7%.
Las acciones de Inditex de Marcos, bajo el cuidado de su hermana, las obtendría su hermana Sandra. Esto, sumado al 5% que heredó tras la muerte de su madre, convertiría a la hija mayor de Amancio Ortega en la verdadera heredera de Inditex. En cambio, su hermana Marta solo obtendría el 20%.
No obstante, la herencia sería más compleja que una simple división de porcentajes, ya que en Galicia existen distintos mecanismos con los que Amancio podría conseguir que su hija Marta fuera la que terminara controlando Inditex.
La mujer más rica de España, y sigue creciendo su fortuna
Con la muerte de su madre, Sandra, licenciada en psicología, heredó en 2013 la gestión de un patrimonio valorado en 4.700 millones de euros, con lo que se convirtió en la mujer más rica de España.
Sin embargo, la hija mayor de Amancio Ortega no es solo una rica heredera, ya que ha sabido sacar rentabilidad a su fortuna. A través de distintas inversiones a través de Rosp Corunna ha conseguido aumentar su fortuna: en 2014 consiguió que su patrimonio creciera con 3,7 millones, pero en 2015 esta cifra subió sumando 52,9 millones.
Según las últimas cifras aportadas por Forbes, donde Sandra se sitúa la decimonovena mujer más rica del mundo, el patrimonio de la hija Amancio asciende a 6.700 millones de dólares. Una cifra nada desdeñable para una mujer que se tiñe el pelo ella misma.
Matrimonio con el amor de juventud
Sandra y Pablo Gómez, de familia humilde, se conocieron cuando ambos estudiaban en el instituto público Ramón Menéndez Pidal. Años después se casaron en una ceremonia que no trascendió al público.
El matrimonio, que se mantiene a día de hoy, vive en una finca en La Coruña y tienen tres hijos: Martiño (20), Antía (16) y Uxía (14), todos ellos educados en colegios públicos. Sandra, al parecer, ha querido criar a sus hijos con la misma humildad con la que la crió su madre, Rosalia.
Pablo trabaja en Inditex, mientras que Sandra se dedica a la Fundación Paidaei, fundada por su madre, que se encarga de desarrollar proyectos en favor de la discapacidad, el emprendimiento y el desarrollo territorial.