David Bustamante (36 años) quiere dar un vuelco a su vida y acabar con los rompecabezas sentimentales que ha vivido en el último año. Él decidió poner fin a su matrimonio con Paula Echevarría (40) tras diez años de matrimonio, él dijo no sentir lo mismo, él tomó la iniciativa. Pero ahora las tornas han cambiado y su decisión se ha vuelto en su contra.
Ella, inmersa en sus nuevos proyectos profesionales, hace siempre un hueco para afianzar su relación sentimental con Miguel Torres (32). Él, sin nueva pareja reconocida y con una carrera musical que se ha quedado en stand by. Atrás queda el camino que compartían, junto a su hija Daniella, y en el que nunca faltaron las carantoñas frente a los fotógrafos. En el recuerdo están las instantáneas que compartían el uno del otro haciendo alarde de relación. Hoy, cada uno por su lado, trata de rehacer su vida sentimental.
Bustamante se ha embarcado en una nueva aventura profesional que nada tiene que ver con lo que ha hecho hasta el momento. Ni discos, ni gira, ni conciertos. Su próxima parada es la televisión. El cantante será uno de los participantes de Bailando con las estrellas, allí bailará junto a Pelayo Díaz (30) y Gemma Mengual (41), entre otras celebtrities.
Los nuevos planes del extriunfito siguen la tónica de los últimos meses: nada de música y algo más de espectáculo. En febrero de este año, dos meses antes de que se hiciera oficial el divorcio de la pareja, el cantante anunciaba su retirada de los escenarios durante unos días. El cántabro alegó problemas de salud y se respaldó en un comunicado para cancelar tres de sus conciertos.
Bustamante ha cambiado el escenario por el plató. Envuelto en sus proyectos televisivos, no contempla aumentar la gira de conciertos. Sus fans tendrán que esperar para poder verlo en directo y escucharle cantar porque, de momento, no tiene ningún concierto planeado. El mismo cantante que se hizo de oro cuando tocó la cima tras Operación Triunfo, hoy aparta la música.
Mucho han cambiado los proyectos profesionales de Bustamante. Parecen remotos los conciertos y las giras internacionales. Nueve álbumes de estudio a sus espaldas, miles de fans y espectáculos nublados por sus actuales apariciones en televisión y prensa, todas rehuyendo los comentarios sobre su exmujer y sin comentar su estado sentimental.
Pocas veces se le podrá ver al cántabro hablando amigablemente con los medios en los últimos tiempos. Poco queda de aquel dicharachero joven se deshacía en sonrisas al hablar de relación sentimental con Paula Echevarría.
En 2016 publicaba su último álbum de estudio hasta la fecha. Dos años después, Bustamante ha producido dos canciones y ningún disco. El propio artista afirmó en Lecturas que sus últimos proyectos no habían funcionado como él y su discográfica esperaban. Al no cumplir con las expectativas económicas de la firma, los ingresos de Bustamante tampoco lo hicieron y disminuyeron.
Ante este nuevo panorama musical ha decidido entrar de lleno en el mundo de la pequeña pantalla y hacerlo como concursante del talent show. Pero no es el único contrato que podría firmar para la televisión y parece que las negociaciones con La Voz, le podrían convertir en el nuevo coach de Telecinco.
En el último año David Bustamante ha sido un habitual en los programas televisivos. Se le ha podido ver en más de una gala de Operación Triunfo e incluso acudir como invitado a Volverte a Ver, proyectó que inauguró la propia Paula.
Esta tratando de encontrarse a sí mismo, él mismo lo dijo cuando se hizo oficial el divorcio. Un cambio que le ha hecho girar y convertirse en portada de revistas, invitado de televisiones y centro de rumores.
A los problemas económicos se le suma un último quebradero de cabeza. El cantante no consigue vender la casa de Villanueva de la Cañada, hogar que compartió con Paula y del que ahora quiere deshacerse. Ella posee el 20% de la propiedad y él el resto, se trata de una vivienda sujeta a una importante carga económica además de los gastos de la hipoteca. El cántabro, que hace menos de cinco años viajaba en su tourné musical, ahora busca la forma de deshacerse del que fue su nido de amor.
Cambio físico
El último año y medio le han colocado en el ojo del huracán. La exposición mediática le ha acarreado cambios más allá de los profesionales. Bustamante vivió un espectacular cambio de imagen durante los primeros meses de ruptura.
Hasta doce kilos ganó el cántabro, un aumento de peso abundante que él especificó y que, aunque ya no se aprecia en gran medida, sí que se percibe lo que quedó de aquel cambio físico.
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