La cantante Shakira (41 años) y Gerard Piqué (31) se han llevado un gran susto tras descubrir al llegar a su casa de Esplugues de Llobregat que habían sufrido un robo. Según las primeras pistas de la policía científica que está investigando el caso, los ladrones se llevaron relojes de lujo pertenecientes al futbolista y joyas de la cantante.

Tal como ha informado Lasexta TV, se ha tratado de un robo muy estudiado y limpio, ya que los investigadores no han podido encontrar ninguna pista ni huella. Tan pulcro ha sido el hurto, que se está analizando el entorno laboral de la pareja, ya que no se descarta que haya cometido el robo alguien que conocía la casa a la perfección así como los objetos que pretendía sustraer: "como si supieran claramente lo que buscaban y dónde estaba".

Afortunadamente, ni Shakira ni Piqué se encontraban en su casa cuando se cometió el hurto, ya que el deportista se encontraba centrado en la Selección y la colombiana volcada en su gira musical presentando su álbum por Europa. Ante esta situación, los ladrones aprovecharon para entrar en su domicilio. Una de las grandes aliadas para los saqueadores fue la fuerte tormenta que cayó en Esplugues de Llobregat durante la madrugada del desfalco.

Separados por obligación 

Tras muchos rumores de crisis, de problemas personales de cada uno e incluso de infidelidad, la pareja va a tomar caminos diferentes, pero solo porque su agenda laboral así les obliga. La cantante puso rumbo hace unos días a la ciudad alemana de Hamburgo donde ha concedido su primer concierto de su gira mundial. De esta manera, han sido 1.800 kilómetros los que han separado a Shakira de Piqué. Sin embargo, la distancia aumentará en solo unos días. Y es que a mediados de junio comienza el Mundial de Fútbol de Rusia donde la Selección Española luchará por la victoria, y entre sus convocados estará Piqué, a 2.800 kilómetros de distancia de su pareja, que en esos días dará dos conciertos en París. 

Este robo en su casa viene en un buen momento para Shakira, que por fin ha vuelto a subirse a un escenario después de un tiempo alejado de la música por problemas en la voz. Al principio parecía una simple afonía, pero todo empeoró cuando le diagnosticaron una hemorragia en las cuerdas vocales. Se trató de inmediato y aplazó su gira a enero de 2018, pero la enfermedad no mostró mejoras y al tener que plantearse una intervención quirúrgica la idea de volver tras las Navidades desapareció.

Finalmente, Shakira decidió no operarse y seguir un tratamiento para recuperar la voz y mantener las cuerdas sanas. Ya sí es el momento de volver a los escenarios y su energía en los ensayos, los que no ha parado de mostrar en sus redes sociales, demuestran que regresa con las pilas cargadas.

[Más información: Shakira salda parte de su deuda con Hacienda con 20 millones de euros]